CALLE PORVERA

La fuerza de Antonia

CALLE PORVERA Lo de Antonia Castro no tiene nombre. ¿De dónde saca esta mujer las fuerzas? Han pasado doce años y medio desde que asesinaron a su hijo en la gasolinera de Martín Ferrador y desde entonces, incansable, no ha parado de luchar por conseguir que se haga justicia. Y a pesar de los numerosísimos reveses recibidos, absoluciones de los inculpados incluidas, ahí ha seguido, jartible como ella sola.

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Estos días ha protagonizado otro episodio en esa lucha casi en solitario que lleva: una huelga de hambre en el mismo lugar donde mataron a su hijo, Juan Holgado. Ha durado seis días, hasta que Campsa Red ha accedido a indemnizar a su familia con 108.000 euros por lo sucedido -la gasolinera carecía entonces de unas mínimas condiciones de seguridad- y, sobre todo, después de que un médico la aconsejase abandonar porque su vida corría un serio peligro.

Pero esos seis días han bastado para que media España se entere, gracias el considerable eco que se han hecho los medios de comunicación, del calvario que llevan doce años y medio pasando ella y su familia. Y también de que ese crimen que se hizo famoso por la serie de televisión Padre Coraje sigue sin resolver, algo que sin duda hay que agradecer a la investigación policial llevada a cabo en su día y a la cuestionable instrucción judicial realizada.

A pesar de todo, Antonia sigue en pie, peleando. Dice que los 108.000 euros que presumiblemente recibirá de Campsa Red los destinará a seguir luchando para que se haga justicia y para que los que asestaron esa treintena puñaladas cobardes a Juan Holgado paguen por lo que hicieron. Ésa es su meta, su gran objetivo en la vida. Y no descansará en paz hasta lograrlo.