Los bares de La Punta serán obligados a mejorar sus medidas de seguridad

Más seguridad, más limpieza y mejores condiciones de conservación. Estos tres puntos pasarán a ser de los más valorados por la Autoridad Portuaria a la hora de optar a las concesiones de los 25 bares de La Punta, que este año concluyen su contrato con el Puerto. Aunque aún no se conoce cómo se materializarán estas premisas en los pliegos para optar a la renovación o a una nueva concesión, algunos hoteleros han reivindicado que la seguridad está cubierta en las exigencia de la licencia de apertura y de que ya pagan «un alto precio» en concepto de limpieza de los viarios.

El presidente de la Autoridad Portuaria, Rafael Barra lanzó ayer un primer aviso a navegantes para los empresarios. Anunció que el Consejo de Administración portuaria ha autorizado la redacción del pliego de bases y de las condiciones de explotación de los locales para los que se valorará «la seguridad, la limpieza y la conservación».

Barra justificó esta medida «en base a los acontecimientos últimos que se han producido en esta zona», en alusión implícita a los numerosos problemas de orden público -sobre todo peleas y agresiones-, de limpieza y de conservación que se producen de forma más o menos habitual en la avenida Pascual Pery. Una zona que además acoge cada semana a la única zona autorizada de la ciudad para practicar el botellón.

El primer establecimiento que tendrá que renovar su concesión es el denominado Anfiteatro, que cumple dentro de dos meses y ya tiene redactada sus bases. Para los restantes aún no se ha concretado como afectarán las nuevas condiciones,pero la filosofía será primar a las ofertas con mejores medidas de seguridad y limpieza para los alrededores, confirmaron desde la Autoridad Portuaria.

El anuncio ha sido recibido con precaución por los hosteleros consultados, hasta el punto que pidieron no incluir sus nombre hasta conocer en profundidad las nuevas bases. Uno de los propietarios con más antigüedad de La Punta hizo valer esta circunstancia recordando que la mayoría de hosteleros «llevan 15 años trabajando aquí y la mayoría van a mantener sus locales». «Es un poco absurdo hablar de la limpieza cuando estamos pagando 589 euros cada dos meses por ese servicio, que no se paga en ninguna parte», lamentó este empresario. «La mayoría somos padres de familia que tenemos nuestro negocio y no nos planteamos irnos. Es normal que suban las tasas pero habrá que sentarse y ver que requisitos se ponen», continuó. «Cada local, según sus características, ya cuenta con unas medidas de seguridad que van en la licencia de apertura, como puede ser lo que miden los lavabos para minusválidos, y llevamos mucho tiempo cumpliéndolas», remató.

Otro hostelero, en este caso uno que estaría dispuesto a optar a una concesión en La Punta, tiene otra visión. «La gestión que se hace del local es fundamental y hay muchos empresarios a los que les puede dar igual quien entre o quien salga. La mejor seguridad es que no sea necesaria la seguridad. Para eso es fundamental que los empresarios se esfuercen en conseguir un ambiente agradable. Y no todos se preocupan por eso», advierte. «Los empresarios tienen que luchar para que la gente pierda el miedo a ir a La Punta y se quede en Cádiz. La culpa no es del botellón, que lo hacen los universitarios, sino de que haya una pelea, porque la gente no habla de una pelea en un bar, habla de una pelea en La Punta», resume este hostelero. «Tienen que entrar empresarios que estén dispuestos a trabajar y a lograr un buen ambiente», insiste este experimentado profesional.

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