José Luis Rodríguez Zapatero (i) y Mariano Rajoy se saludan a su llegada al plato de IFEMA. /RC
camino a la moncloa | día 4

Rajoy y Zapatero reeditan en un intenso 'cara a cara' televisado sus desencuentros de la legislatura

Tras un comienzo de contenido económico, los candidatos han elevado el tono del debate al referirse al atentado del 11-M y la lucha contra ETA

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El primer debate televisado de los últimos 15 años ha dejado para el recuerdo un intenso intercambio de reproches entre Zapatero y Rajoy, que han reeditado ante las cámaras los duelos dialécticos protagonizados durante la pasada legislatura como presidente del Gobierno y líder de la oposición.

Tras un comienzo basado en la economía y el balance de la legislatura desde ambos prismas, el debate se ha intensificado al abordar el terrorismo, uno de los temas más candentes de la legislatura que termina.

Economía, empleo y políticas sociales

"¿Estamos mejor que hace cuatro años?" con esta pregunta el líder de los 'populares' ha inaugurado el debate recriminando al presidente los indicadores económicos, la "falta de rumbo" y la "improvisación" política, así como su "impasibilidad" ante la dificil situación económica que atraviesa el país. Zapatero, por su parte, ha defendido los logros de su legislatura y el crecimiento de la economía española a un nivel "similar al resto de países europeos" y ha lamentado que Rajoy continúe utililizando la "demagogia" que, junto a la "mentira" y a la "exageración" han dominado sus cuatro años de oposición.

Las cifras han dejado paso a las políticas sociales. Rajoy ha centrado su discurso en la inmigración y ha acusado a Zapatero de provocar un 'efecto llamada' "que se oyó en todo el mundo" y que ha provocado "una avalancha" de inmigrantes que el Gobierno "no ha sabido controlar". El líder socialista ha intentado evadir el tema pero, finalmente, le ha reprochado "¿Con qué cara habla usted de regularizaciones?, usted que regularizaba con un bono - bus ".

Política exterior y de seguridad

La temperatura ha comenzado a subir con uno de los temas claves de la legislatura: el terrorismo. El líder del PP se ha mostrado firme y contundente, "yo no negociaré con ETA". Rajoy ha acusado a Zapatero de ser "frívolo" e "imprudente" y de haber buscado el enfrentamiento con las víctimas del terrorismo. Zapatero ha lamentado el "uso partidista" que el PP ha hecho de las víctimas y, además, ha reprochado a Rajoy la falta de apoyo en un tema en el que, ha recordado, él ofreció un "cheque en blanco" desde su puesto en la oposición.

Ante las continuas acusaciones del candidato popular, Zapatero, con la mirada puesta la pasada legislatura, ha respondido tajante que tras el Gobierno de Aznar "ETA no estaba tan acabada si usted le atribuyó el atentado del 11-M". A lo que ha añadido que la imagen de paz que España se ha ganado en política exterior durante su mandato contrasta con la foto de las Azores con la que su antecesor llevó a España a la guerra de Irak. "Hable de lo que le importa a los españoles", le ha espetado el líder del PP para, a continuación, resumirle las alternativas posibles en esta materia: "Yo, Merkel y Sarkozy; usted con Chávez y Castro".

La Política Institucional y retos de futuro

Rajoy ha comenzado el cuarto bloque acusando al Gobierno de "abrir el melón de la discordia" en el tema de las autonomías por decir al comienzo de su mandato que el concepto de "nación" era "discutible" mientras que Zapatero ha criticado el 'apocalipsis' con el que el PP ha intentando crispar y ganar votos en Cataluña al grito de "se rompe España", lo que ha calificado de "desfachatez".

Un cruce de reproches sobre los Estatutos de Autonomías y el polémico trasvase del Ebro han dado paso a las propuestas que ambos candidatos llevan en sus programas electorales. Según el líder popular, la globalización es el principal reto del futuro y acceder a una vivienda es el de los jóvenes españoles, un problema, que, desde su punto de vista, se debe a la "incompetencia" del Gobierno y al "fiasco colosal" del Ministerio de Vivienda.

Para Zapatero la gran prioridad del futuro son la investigación y la educación, en las que su Gobierno ha hecho grandes avances a diferencia, a su juicio, del de su adversario que "en vez de aumentar el gasto en investigación y las becas en educación, lo que hizo fue reducir y congelar las becas y el apoyo a lo que representa el futuro que es la educación".

Antes de dar paso a las conclusiones se producía uno de los momentos de máxima tensión cuando Rajoy ha vuelto sobre el tema del terrorismo para acusar al presidente de "agredir a las víctimas" produciéndose un agrio enfrentamiento entre los dos candidatos.

Dos posturas en la petición del voto

En su discurso final, un Rajoy poético ha emplazado a los españoles "a mirar con optimismo y esperanza" al futuro y así acudir a las urnas el próximo 9-M. El candidato del PP ha escenificado sus deseos para los próximos cuatro años evocando la imagen de una niña nacida en España y para la que ha deseado "una familia, una vivienda y padres con trabajo". Pero, para ello, es necesario que "caminemos juntos" ya que "España es cosa de todos" y "debemos tomárnoslo muy en serio".

El líder del PSOE ha mostrado su convencimiento de dejar una España "fortalecida" tras cuatro años trabajando con "fuerza" y "humildad" al frente del Gobierno. Para la próxima legislatura se ha propuesto "seguir aumentando la prosperidad" y ha solicitado el voto para "avanzar en la conciliación, igualdad y políticas sociales". Zapatero ha asegurado que, aunque no puede "prometer que todos tengan éxito en la vida", sí puede procurar que "tengan las mismas oportunidades". Como broche final, el líder socialista ha tomado prestado el lema del célebre periodista estadounidense Edward R. Murrow y ha cerrado el debate con un "buenas noches y buena suerte".