La oposición de Kenia hace un llamamiento a la participación en las protestas de la próxima semana

Un día después de que fracasase la mediación de la Unión Africana para resolver la mayor crisis de la historia de Kenia, el partido del líder de la oposición, Raila Odinga, ha anunciado la reanudación de las manifestaciones y ha hecho un llamamiento para que la participación sea masiva. El opositor Movimiento Democrático Naranja (ODM) ha acusado al presidente Mwai Kibaki de rechazar toda solución negociada.

La oposición de Kenia ha convocado hoy manifestaciones de protesta el miércoles, jueves y viernes de la semana próxima, y ha responsabilizado al Gobierno del fracaso de las gestiones de mediación que concluyeron ayer.

Las protestas han sido convocadas en más de veinte ciudades del país, y la idea es que se trate de manifestaciones pacíficas, según ha anunciado en una rueda de prensa el secretario general del Movimiento Democrático Naranja (ODM), Anyang Nyong'o.

De momento, el Gobierno no se ha pronunciado ante estas nuevas concentracioens aunque tras el anuncio de la reelección de Kibaki, el 30 de diciembre, impidió todas las manifestaciones convocadas por la oposición.

Medio millón de necesitados

La ONU ha informado hoy de que ha revisado al alza el número de personas que necesitarán ayuda humanitaria en Kenia, que ahora cifra en 500.000, como consecuencia de la violencia generada por la reelección de Kibaki.

La portavoz de la Oficina de Ayuda Humanitaria de Naciones Unidas (OCHA), Elizabeth Byrs, ha anunciado igualmente que la organización prepara un petición de fondos de emergencia para garantizar esa asistencia durante las próximas semanas y meses.

Por el momento, la ONU ha desbloqueado 7 millones de dólares de su fondo de emergencia, lo que le ha permitido atender de manera inmediata a los desplazados por la violencia en áreas básicas como nutrición, salud, agua y saneamiento.

Se calcula que la violencia ha causado hasta ahora entre 500 y 1.000 muertos, y provocado alrededor de 255.000 desplazados, muchos de los cuales han sufrido la destrucción de sus viviendas y lo han perdido todo.