ENFADADO. Nano no ha controlado su impulso.
Cádiz C.F.

El primer regate de Nano

El futbolista del Cádiz se niega a comparecer ante la prensa, molesto por las numerosas críticas recibidas

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Nano se une a la lista de los Sesma, Fredi y compañía, aquellos que se negaron a comparecer ante la prensa al considerar injusto el trato recibido y optaron por el regate a los micrófonos y el desmarque hacia el caminito de El Rosal.

El gallego, que lleva temporada y media en el Cádiz con un rendimiento nefasto, decidió ayer dejar plantado a todos los medios de comunicación que llevaban más de una hora esperando su comparecencia.

Nano es noticia. La lesión de Gustavo López le abre de nuevo las puertas de la titularidad. Es su enésima oportunidad para demostrar que todavía vale para el fútbol, y que es capaz de justificar su elevado sueldo. En un primer instante pensó en acudir a la llamada, pero minutos después optó por la escapada.

No da explicaciones

Lógicamente, no dio ninguna explicación, pero es obvio que el futbolista está molesto con las críticas recibidas por parte de los periodistas. No sólo desde la prensa llueven los palos, también la afición le ha silbado de lo lindo cuando ha saltado al césped, pero él considera que todo se debe a la influencia de los medios.

El ex del Barcelona se las prometía muy felices con la llegada de Calderón. El técnico gaditano le dio confianza e incluso lo alineó como titular en Elche, y le dio entrada desde el banquillo contra el Xerez. Pero a partir de ahí, y tras todas las críticas recibidas, el entrenador ha dejado hasta de convocarle.

Nano ha sido el primero en mostrar su enfado con el sector periodístico, pero no es el único. Ayer, y de puertas para adentro, parte del vestuario volvió a criticar duramente a distintos profesionales de los medios. Consideran que el nivel de crítica es exacerbado, no merecido pese a que incluso han ocupado puestos de descenso cuando el objetivo por presupuesto es ascender a Primera.

El último futbolista amarillo que tuvo problemas con la prensa fue Jonathan Sesma, quien se negó a comparecer en varias ocasiones si bien atendía a los profesionales de Valladolid, donde finalmente ha acabado. El gesto de Nano no ha gustado en el club, que propugna la unión de todos los estamentos, y es probable que le caiga alguna sanción.