Opinion

Condoleezza en Turquía

La visita de la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, a Turquía, prevista para el sábado y con llegada a Estambul, se adelantará a mañana y aterrizará en Ankara, capital de la república y sede del gobierno. Su entrevista con el primer ministro Erdogan puede ser clave para la actitud final que adopte el gobierno turco, un apreciado miembro de la OTAN con una gran hoja de servicios a Washington durante la guerra fría, en relación con la actividad guerrillera kurda en su suelo.

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Erdogan ha dicho que lo que hacen las autoridades autónomas kurdas en el Kurdistán iraquí vecino es, sencillamente, dar abrigo a terroristas y, dato políticamente relevante, mencionó por su nombre al jefe del gobierno regional en Erbil, Massud Barzani, asociándose así a la extendida tesis de que el clan de los Barzani está mucho más cercano al PKK y comprende mejor su conducta que el clan de los Talabani (del presidente de la República iraquí, Yalal Talabani). El primer ministro actúa con el respaldo de la unanimidad del poderoso Consejo de Seguridad Nacional, que hasta hace poco era el feudo desde el que los militares sugerían al poder civil lo que debía hacer y, por tanto, la expresión de un cogobierno de hecho con el ejecutivo elegido que dañaba la credibilidad de la democracia turca.

Ahora el dúo Erdogan-Gül (presidente de la República y, como el primer ministro, islamista moderado) impone sin mayores problemas su criterio que, hasta hoy, es claro como el agua: prepararse, advertir que el gobierno no vacilará en recurrir a una ofensiva en Iraq si es indispensable pero prefiriendo combatir solo en suelo turco (ha matado a 65 guerrilleros desde el 20 de septiembre) y recurrir a eventuales sanciones comerciales y económicas. Bush y Condoleezza Rice han pedido autocontención al aliado turco y se oponen a un ataque a fondo en el Kurdistán iraquí y la gestión de mañana de la Secretaria de Estado en Ankara prefigura la crucial que Erdogan sostendrá con el presidente norteamericano en Washington el lunes próximo. La cita sirvió, en cuanto fue acordada, como una fecha que de facto ayudaría a contenerse a los turcos. Que, en efecto, se han contenido hasta ahora.