Rectificar ¿es de sabios?
El Sabio de Hortaleza, ese personaje que ha conseguido que yo me pase las horas enteras buscando su pueblo cada vez que voy a Madrid y que, además, ha ridiculizado a otro de su pueblo -porque si él es sabio así será el más tonto-, ha dado una vuelta de tuerca más en su tortuosa relación con la prensa. Ahora va a resultar que Clemente no va a pasar a la historia por ser el seleccionador que peor se ha llevado con mis compañeros de gremio.
Actualizado: GuardarEste personaje, conocido por su relación de amor con los cartones, ya sean de tabaco o de bingo (no es una crítica, cada uno hace con su vida lo que le da la gana), tiene un currículum que está a años luz del mejor seleccionador de la historia moderna del fútbol, Carlos Salvador Bilardo. Y nombro al técnico narigón argentino porque cuando era entrenador del Sevilla y, tras una hiriente derrota, fue capaz de dejar su coche aparcado en el aeropuerto de San Pablo y volverse en autobús con sus jugadores. Vamos, lo mismo que hizo el Sabio después del partido contra Letonia en Oviedo. Aunque al parecer la justificación era que estaba huyendo de la prensa. Y es que el tío es experto en justificaciones. Aún me acuerdo cuando convocó al malogrado Antonio Puerta argumentando que lo hacía porque era más fácil llamar a alguien que estaba entrenando con la sub'21 que molestar a otro futbolista que estaba de vacaciones. Eso sí, a Pernía le hizo retrasar su boda para jugar el Mundial de Alemania. Pero entonces se llevaba bien con los plumillas y, claro, había que satisfacer los deseos de la prensa mafional.
Ahora tras decir que no volvería a hablar, ha tenido que dar marcha atrás porque se ve que alguien le ha recordado que está obligado a hacerlo después de los partidos. Rectificar es de sabios, aunque éste es capaz de dejar mal al mismísimo Sócrates.
