Mojácar, última parada del tren de Glasgow

Pasaba como uno más de los jubilados británicos afincados en la costa almeriense, pero acaparaba una peculiar historia. Gordon Goody ha fallecido en Mojácar a la edad de 86 años, para muchos su nombre no dice nada, pero su «hazaña» sí. Este octogenario fue uno de los atracadores del tren de Glasgow en 1963.

El ladrón, tras cumplir su condena de prisión, trasladó su residencia a Mojácar y es ahí donde ha vivido hasta el último de sus días. Pese a tratarse de un delincuente, el Ayuntamiento de Mojácar le ha rendido un homenaje a título póstumo al encargarse de hacer público su fallecimiento como si de un héroe se tratara. En el comunicado remitido por el consistorio mojaquero se anuncia la muerte de «uno de los protagonistas del atraco más famoso de Inglaterra, que vivió en Mojácar durante muchos años».

«Queda entre nosotros para siempre su sonrisa, su gran envergadura que aún así no era suficiente para albergar el gran corazón abierto a todos los que se acercaban a él», apuntan desde el Ayuntamiento. Además, destacan que «todos los que tuvieron oportunidad de conocerle resaltan su amabilidad, su cariño a la familia, a los amigos, a sus muchas mascotas salvadas de la calle....». Para el ayuntamiento se trata de «todo un caballero que se aleja de la imagen que pudieran tener aquellos que no le conocían o que se podría tener a tenor de los difíciles años que marcaron gran parte de su vida».

El asalto a un tren de correos que se dirigía desde Glasgow (Escocia) a Londres cuando se acercaba a la localidad inglesa de Cheddington se consideró el mayor robo a un ferrocarril del pasado siglo. El botín con el que se hicieron los ladrones, de 2,6 millones de libras (3 millones de euros), supuso todo un récord entonces y hoy equivaldría a unos 40 millones de libras (46,2 millones de euros). Se da la circunstancia de que otro de los componentes de la banda, Charles Wilson, también se instaló en la costa española tras su puesta en libertad en 1978, y murió asesinado de un disparo en 1990 en su casa de Marbella.