Soldados turcos acusados de intentar asesinar al presidente Erdogan, en la noche del frustrado golpe de Estado del 15 de julio, llegan escoltados a los tribunales de Mugla esta semana
Soldados turcos acusados de intentar asesinar al presidente Erdogan, en la noche del frustrado golpe de Estado del 15 de julio, llegan escoltados a los tribunales de Mugla esta semana - Reuters

Erdogan asegura que Turquía podría convocar otro referéndum para restaurar la pena de muerte

El presidente islamista insiste en el debate sobre la pena capital a pesar de que a puerta cerrada diversos fuentes del Gobierno lo han descartado por completo

Corresponsal en Estambul Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La cita electoral más importante para la historia reciente de Turquía se aproxima y Recep Tayyip Erdogan, que se juega aumentar sus poderes ejecutivos, quiere movilizar a sus fieles. Y uno de los asuntos que más pasiones levanta desde el fallido golpe de Estado es el de implantar de nuevo la pena capital, abolida en el año 2004, bajo su propio mandato.

«Dije que aprobaría la [restauración de la] pena de muerte si es aprobada por el Parlamento. Pero el problema es que este cambio requiere una reforma constitucional. Así que dejadme decir: También podríamos preparar el terreno para un referéndum sobre esto si es rechazado por el Parlamento», ha clamado el presidente turco durante un mitin en la provincia de Manisa, en el oeste del país.

«Si Dios quiere, le daremos a la nación un referéndum sobre esto también», ha añadido.

«Si la nación dice ‘traed de nuevo la pena de muerte’ no hay nada más que decir»

Erdogan retoma así una de sus posturas más radicales. «Si la nación dice ‘traed de nuevo la pena de muerte’ no hay nada más que decir», ha reiterado durante su discurso.

No obstante, tras la sublevación militar del pasado mes de julio, que supuso la muerte de cerca de 240 personas, cuando el presidente comenzó a insistir en este asunto, diversos fuentes gubernamentales consultados por este periódico han descartado por completo esta posibilidad. Estas fuentes señalan que los comentarios del presidente son «para consumo interno».

De hecho, esta medida va contra los mismos esfuerzos del Gobierno por avanzar con la candidatura de Turquía para entrar en la Unión Europea. Desde Bruselas se señala que la pena de muerte congelaría automáticamente el proceso. Precisamente con el objetivo de entrar en el club europeo el Ejecutivo del entonces primer ministro Erdogan abolió la medida en 2004.

Sin embargo, Erdogan no está solo. Devlet Bahçeli, el líder del partido opositor ultraderechista Partido de Acción Nacionalista (MHP), ha asegurado que «también está listo» en caso de que el islamista y gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP) «esté preparado para el asunto».

No tienen mayoría

La alianza del AKP y el MHP en el Parlamento no suma una mayoría de escaños suficientes para poder realizar cambios constitucionales, pero sí para convocar consultas vinculantes sobre ellos. De hecho, el Gobierno ha echado mano de esta maniobra para recabar los apoyos necesarios y convocar el referéndum que el próximo 16 de abril decidirá si Turquía se convierte en un Estado presidencialista.

De ganar el «sí», la figura del primer ministro desaparecería, Erdogan se convertiría en la cabeza del poder ejecutivo y su influencia sobre el ejecutivo aumentaría, al mismo tiempo que el Parlamento perdería poder de control sobre el Gobierno.

Ver los comentarios