El MNAC busca poner en valor su colección permanente

La Biblioteca del MNAC es el lugar idóneo para escuchar las directrices que seguirá este buque insigne de la cultura catalana. Su director Pepe Serra se explayó ayer con el programa de exposiciones para 2017 que rescata a Ismael Smith, Pere Torné Esquius y Ramon Pichot; la presentación de un relato más provocador del Renacimeinto y el Barroco a partir de primavera y la voluntad de convertir la montaña de Montjuic en un polo cultural urbanizado.

«Es mi quinto año como director del Mnac, mi contrato se acaba a finales del próximo febrero pero si me renuevan continuaré al frente -explica Serra-. Estamos muy contentos con los resultados de estos años porque partimos de cuatrocientos mil visitantes y ya estamos en ochocientos mil».

Entre las novedades de organigrama destaca un concurso de gerencia para substituir a Josep Maria Carreté, que se ha ido de gerente al MACBA.

Tras el éxito de la presentación del arte moderno a final de 2014 ahora se ultima un nuevo relato más provocador intelectualmente de los periodos de Renacimiento y el Barroco, una de las colecciones menos conocidas del museo. «La nueva presentación cubrirá un periodo de 300 años, entre los siglos XVI y principios del XIX -puntualiza Serra-; y permitirá hacer visible el legado de Cambó de forma conjunta con el resto de la colección, así como obras de la Colección Thyssen-Bornemisza en un relato temático y cronológico».

La precariedad de Montjuic también preocupa al MNAC.. «Yo no bajo la guardia para conseguir un polo cultural urbanizado y creo que la conquista de los pabellones de Fira Barcelona para ganar espacio para exposiciones temporales tiene hoy más sentido precisamente para conseguir un proceso de descentralización que puede beneficiar a todos los espacios culturales de la montaña».

Para 2017, el presupuesto será de 15,2 millones de euros, respecto a los 14,33 millones del año anterior. Por último, Serra celebra la presencia del MNAC en el exterior con una muestra dedicada a Gaudí en Brasil, tres exposiciones sobre el imaginario de Fortuny en Granada, Zaragoza y Sevilla y las exposiciones de Casas en Sitges, Madrid y Palma de Mallorca.