Homenaje en Toledo a los valores «aún hoy vigentes» de los comuneros

«Pedir al rey nuestro señor tenga por bien se hagan arcas de tesoro en las Comunidades en que se guarden las rentas destos reynos para defendellos e acrecentarlos e desempeñarlos, que no es razón Su Cesárea Majestad gaste las rentas destos reynos en las de otros señoríos que tiene». Este escrito de protesta al rey Carlos I, con motivo de su desvío de impuestos, forma parte de un valioso documento, conservado en el Archivo General de Simancas (Valladolid), en el que aparece por primera vez la palabra Comunidades.

Los comuneros, como se llamó a todo aquel que encabezó esas protestas en Castilla entre 1520 y 1521 contra el emperador Carlos V, han recibido este sábado en las calles de Toledo su tradicional homenaje organizado por el Partido Castellano (PCAS), con una reivindicación de su figura y de sus valores, «vigentes en la actualidad», según los asistentes.

El acto principal ha tenido lugar, como siempre, en la plaza de Padilla (en honor al toledano Juan de Padilla, uno de los líderes de esa rebelión), donde se hace una ofrenda floral a la estatua de este personaje.

El homenaje, celebrado de forma ininterrumpida desde 1988, ha congregado a decenas de personas y, como cada año, un personaje conocido hace la ofrenda floral. En esta ocasión, el encargado ha sido el escritor madrileño Lorenzo Silva, quien se ha sumado a las reivindicaciones de las figuras de los comuneros, «cuyos valores de dignidad, de libertad y de verdad siguen aún hoy vigentes», ha afirmado.

El autor de obras como «El alquimista impaciente» (Premio Nadal en 2000) o «La marca del meridiano» (Premio Planeta en 2012), entre otros 60 títulos, cree que los comuneros representan dos cosas: por una lado, la «reivindicación de la justicia» y, por otro lado, un llamamiento al «buen gobierno». Algo que ha resumido con la siguiente frase atribuida a los líderes de la revuelta: «El poder se merece, y el que no lo merezca no lo puede ocupar». A su juicio, los comuneros «estuvieron siempre al lado del pueblo y le dieron voz frente al poder».

Castilla dentro del edificio de España

Pero Lorenzo Silva también ha reivindicado el papel de Castilla en la actualidad dentro de España, que, según él, como si fuera un edificio, «hay que rehacerlo o, por lo menos, encalar su fachada». Por eso, ha echado de menos en los medios de comunicación las reivindicaciones de este territorio, en contra de lo que pasa con otras comunidades autónomas. «Hay que hacerse oír», ha manifestado el escritor madrileño, para quien el mejor instrumento que tienen los castellanos es su idioma, el segundo del mundo por el número de personas que la hablan como lengua materna.

Por su parte, Luis Marcos, secretario de Organización del PCAS, ha calificado el episodio histórico de la Guerra de Comunidades como «la primera revolución moderna de la Historia de la Humanidad», citando al sociólogo y político José María Maravall. Como líder de este partido, más allá de los votos, ha señalado que seguirán luchando por su tierra y por una serie reivindicaciones que llevan tiempo haciendo.

En el caso de Toledo, por ejemplo, Luis Marcos ha insistido al Ayuntamiento toledano para que se erija una estatua en la ciudad a María Pacheco, mujer de Juan de Padilla y otra de las líderes de la revuelta comunera. En referencia al tiempo que se ha tardado en colocar una estatua a Padilla en la plaza que lleva su nombre, ha expresado: «Esperemos que no tengan que pasar otros años».