Debate a 4Rivera, sobre el debate: «Hicimos un gran trabajo, Ciudadanos ayer se consolidó como alternativa»

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha explicado este martes que está «muy contento» del trabajo realizado ayer en el debate. «Ayer Ciudadanos se consolidó como alternativa al conformismo y al populismo».

En un acto en Salamanca en el que ha sido recibido con aplausos y gritos de presidente, ha destacado que su patido demostró ayer que es una alternativa ya que fueron al debate «no sólo criticando, sino también proponiendo». También ha asegurado que su estrategia para el 26-J no ha variando, es decir, que sigue proponiendo «un cambio» para España.

Precisamente, preguntado por si apoyaría a Mariano Rajoy, aseguró que «sin regeneración no habrá cambio y Rajoy no lo representa». Según dijo, los papeles de Bárcenas y otros casos investigados «evidencian que la nueva etapa politica no la puede liderar Rajoy».

Además, para Rivera la sorpresa del debate fue la "pinza" entre PP y Podemos. "Yo, el único pacto de no agresión que vi ayer fue entre Rajoy y Pablo Iglesias", ha dicho a preguntas de los periodistas sobre su dinámica con Pedro Sánchez, en la que apenas hubo ataques.

Confianza y optimismo

La sensación dentro de Ciudadanos es de triunfo. El debate no pudo ser más diferente al celebrado en diciembre y las sensaciones, también. Fuentes del partido confirman que las impresiones respecto a la intervención del líder de Ciudadanos, Albert Rivera, son muy buenas y que el trabajo previo ha dado sus frutos.

El debate supuso una inyección de confianza y optimismo para todo el equipo, al contrario que el de los pasados comicios. En aquella ocasión, los nervios le jugaron una mala pasada al candidato y no convenció. En el de ayer, se vio a un Rivera relajado, disfrutando y tratando de defender que tiene un proyecto político sólido.

En el único debate a cuatro de estos comicios, además de los nervios, Rivera tenía el riesgo añadido de quedarse descolgado por la polarización entre PP y Podemos. Por eso, la dirección del partido apostó por una preparación a conciencia que abarcara la puesta en escena y las réplicas. No defraudó e incluso a su equipo le sorprendió lo sereno que estuvo el líder del partido, que supo encontrar su espacio golpeando a su izquierda y derecha.

Ayer no hubo dudas. Los abrazos y la alegría en el camerino fueron inmediatos. No habían pasado ni cinco minutos del final del debate cuando Rivera subía una foto con su equipo dentro del camerino. Ninguno de los integrantes podía reprimir la sonrisa. Según el primer balance, el debate de ayer puede suponer un claro impulso para el resto de la campaña.