El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, compareciendo en el Congreso
El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, compareciendo en el Congreso - EFE

Linde insta al Gobierno a nuevos ajustes fiscales si la recaudación tributaria es más baja de lo previsto

El Banco de España recomienda al Ejecutivo presentar planes plurianuales de consolidación de las cuentas públicas

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Ministerio de Hacienda ha proyectado en los Presupuestos Generales del Estado de este año una recaudación récord sin subir impuestos. En concreto, de 200.963 millones de euros, un 7,8% más que lo recaudación en 2016, una cifra que se antoja muy optimista teniendo en cuenta que es muy superior al crecimiento nominal del PIB esperado, del 4%. Así lo considera también el Banco de España, que insta por tanto al Gobierno a estar vigilante y tomar medidas de ajuste fiscal adicionales –recortes del gasto o subidas de impuestos – en caso de que finalmente la recaudación no sea la prevista inicialmente.

"Resultaría necesiario realizar un seguimiento continuo de la evolución de la recaudación durante el ejercicio, de manera que pueda reaccionar a tiempo en el lado del gasto o en el de los ingresos en caso de que se materialicen los riesgos para el objetivo de déficit", ha dicho este martes el gobernador, Luis María Linde, durante su comparecencia en la comisión de Presupuestos del Congreso de los Diputados, en la que se ha comenzado a discutir el proyecto de las cuentas del Estado para su aprobación.

Linde ha consideraso especialmente optimista la previsión de ingresos por cotizaciones sociales del Ejecutivo popular, de un 6,3% más, según el gobernador "superior al de sus bases", es decir, que las cotizaciones crecerían más que lo previsto para el empleo y los salarios. Hacienda, que ya en 2016 vio incumplido su pronóstico de recaudación y tomó medidas impositivas para cumplir el déficit, confía en alcanzar ese objetivo de recaudación porque su previsión de crecimiento del PIB, del 2,5%, es conservadora y se revisará al alza este mismo mes.

El Banco de España considera esencial avanzar en la senda de la consoldiación fiscal y el cumplimiento de los objetivos de déficit público y de reducción de la deuda. "El ajuste pendiente es todavía significativo", ha dicho Linde en la Cámara baja, recordando a los diputados que el contexto actual de crecimiento económico elevado y bajos tipos de interés es favorable para reducir el déficit público estructural y la ratio de deuda pública sobre el PIB.

En este sentido, el gobernado ha planteado al Gobierno la posibilidad de elaborar planes de consolidación fiscal a varios años o medio plazo, en lugar de planes anuales, y en los que se incluyan los planes presupuestarios de todas las administraciones, incluidas las autonomías. "Resultaría crucial adoptar una perspectiva temporal que fuera más allá del ejercicio presupuestario anual, con un diseño detallado y creíble de corrección del déficit público orientado a reducir gradualmente el endeudamiento público", ha dicho, proponiendo que ese plan se incluya en la actualización del Programa de Estabilidad que el Ejecutivo debe enviar a la Comisión Europea a finales de cada mes de abril.

Junto a la consolidación fiscal, el supervisor bancario nacional ve en la tasa de paro, el envejecimiento de la población y la baja productividad "los principales factores que limitan el crecimiento sostenido" de la economía española. Y si algo preocupad al Banco de España es la evolución demográfica y su impacto en partidas del gasto como la sanidad, el cuidado de los mayores y las pensiones.

El Banco de España ha dibujado un panorama optimista para la evolución de la economía nacional creciendo al 2,8%, por encima de los principales países de la Eurozona, y basado en el tirón no solo del sector exterior sino también del consumo de los hogares por la mejora del empleo y las rentas, de la inversión y de una recuperación del sector inmobiliario. Ahora bien, Linde ha advertido de que "l retraso en la aplicación de las reformas, o una hipotética reversión de las introducidas desde el inicio de la crisis, dañaría, sin duda, las perspectivas de crecimiento".

Ver los comentarios