Nuria Espert presenta en Sevilla el montaje de «La Loba»
Nuria Espert presenta en Sevilla el montaje de «La Loba» - Vanessa Gómez

Nuria Espert, en sus palabras

Recopilamos algunas de las declaraciones más interesantes de la actriz, premio Princesa de Asturias de las Artes 2016

Madrid Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La actriz Nuria Espert, galardonada con el premio Princesa de Asturias de las Artes en su última edición, ha sido, durante su vida un prodigio sobre las tablas. Lejos del telón, no ha esquivado preguntas, aunque algunas, como las que le hicieron para su segunda biografía, le costaran más. «Algunas preguntas me pellizcaron de verdad, porque significaba remover momentos, y los recuerdos se volvían más intensos, cobraban mucha más vida», aseguró hace unos años, aunque «los malores recuerdos duelen pero pronto se diluyen».

[Nuria Espert, premio Princesa de Asturias de las Artes 2016]

Ha dedicado su vida al teatro, una larca trayectoria por la que ha recibido numerosos premios, pero, a sus 80 años, no ha pensado en retirarse.

«Mientras tenga tantas ganas de trabajar, mientras tenga tantas ofertas y mientras me siga queriendo tanto el público, tendrán que venir los Geos para echarme del teatro», sentenció el año pasado. Es la parte de su vida que más le ha gustado experimentar, en una ocasión así lo expresó: «Me doy cuenta de que mi vida no ha sido demasiado interesante. Se ha reducido a los libros, las exposiciones, mi marido, mis hijas y tres amigos. Cuando me siento más viva es en relación con el escenario».

«Tendrán que venir los Geos para echarme del teatro»

El teatro y la cultura se convirtieron en su vida, y llegó un momento en el que a Espert se le entremezcló lo profesional con lo privado. «Al final ha resultado ser una sola vida y todo se ha mezclado. Yo ya no sé si leo un libro para mi propio placer o para mi formación como actriz», relató en 2007.

[Fotogalería: La carrera de Nuria Espert, en imágenes]

Tan ligada ha estado al teatro que el estado de la cultura en España durante la crisis la tuvo confusa. «La situación es dramática. Muchas compañías van a desaparecer en 2013, cuando el teatro hace falta más que nunca. Soy una persona optimista, pero el desconcierto es absoluto, nadie sabe por dónde tirar», afirmó. Un año más tarde se mostró más crítica, y dejó entrever lo poco que le gustaba hablar del tema: «Ahora hay más corrupción que nunca, es más espectacular… Y ahora vienen los juicios, hay que sajar el grano, que salga toda la porquería… ¡Es asqueroso! ¡Cambiemos de tema!»

La sociedad y los intelectuales

No todos los problemas del mundo cultural y teatral los achacó a la situación política y económica, tampoco se olvidó de la actitud de la sociedad ni de los intelectuales españoles: «La sociedad civil está dormida, los intelectuales no dicen nada, y no veo el músculo privado para mantener ahora la cultura».

«La sociedad civil está dormida, los intelectuales no dicen nada»

Tampoco eludió hablar del independentismo, del que dijo no entenderlo. «No entiendo el sentimiento. ¡Sería terrible que Catalunya se separara del resto! Nací en L'Hospitalet, tuve el primer éxito en Barcelona y tengo el privilegio de hablar catalán, pero no puedo ser nacionalista. No puedo decir: Nosotros somos mejores, únicos y solos», expresó. Se lamentó de la falta de diálogo que hay en el mundo del teatro sobre el tema, de cómo la política se ha convertido en un temá tabú: «en el teatro no se habla ni un segundo de política catalana. En el pasado sabías qué pensaba todo el mundo y se discutía».

A lo largo de su carrera, uno de los autores de teatro que más ha interpretado Nuria Espert ha sido Federico García Lorca. «Ha sido importantísimo en mi vida y mi carrera, que son ya una sola cosa. Es el autor que más he representado y que me ha abierto las puertas de todo el mundo», narró.

Además de ser actriz, ha dirigido ópera, lo que fue un gran momento en su carrera, pero no en su vida personal. «No era feliz, era una persona solitaria, triste, angustiada, con gran ansiedad», aseguró, «en diez años pasé en mi casa seis meses. Iba y venía, siempre sola, y yo soy muy de mi casa, de mi pequeñísimo grupo familiar».

Tan dilatada carrera, que le ha valido tantos premios y palabras, ha sido recogida en dos biografías, algo de lo que siempre se ha sentido agradecida. «Hay pocas personas en el mundo del teatro en España sobre quien se hayan escrito dos libros. Y yo los tengo...», explicó cuando se presentó el segundo manustrico sobre su vida.

Ver los comentarios