Salgado confía en que las autonomías cumplirán el déficit a la vista de los recortes

La vicepresidenta Elena Salgado garantizó ayer que el Estado alcanzará los objetivos de déficit al cierre de 2011 y confió en que las autonomías cumplirán también su parte a la vista de los recortes implementados. Atribuyó el reciente desplome del consumo de las administraciones públicas a la «constatación» de que los planes autonómicos de reequilibrio, que incluyen los ajustes implementados por los gobiernos regionales, «han tenido algún efecto». Los últimos datos de contabilidad nacional difundidos por el INE responsabilizan a esa caída del gasto público del nulo avance (0,0%) de la actividad en el tercer trimestre respecto al segundo.

Desechado el objetivo de aumentar el crecimiento del PIB un 1,3% el presente año, Salgado dejó claro que el Gobierno no renuncia a su otro gran compromiso: reconducir el déficit del conjunto de administraciones al 6% del PIB.

La número dos del Ejecutivo explicó que pese a los sobresaltos el Estado tiene aún «margen» para cumplir con holgura su parte: recortar al 4,4% del PIB su particular desfase entre ingresos y gastos. En ese sentido, detalló que al cierre del ejercicio habrá en la caja 3.200 o 3.400 millones extra, arañados de la partida presupuestada para pagar los intereses de la deuda, que han sido menores de lo estimado.

Salgado puntualizó que el Gobierno ya adoptó en agosto pasado algunas decisiones en previsión de que en la recta final de 2011 España no creciera al ritmo previsto, entre ellas, la anticipación de los pagos a cuenta del Impuesto de Sociedades de las empresas con facturación superior a 20 millones de euros. «Tenemos márgenes en algunas partidas del Estado que van a permitir cumplir con comodidad la cifra de déficit», insistió.

Sobre las «desviaciones» detectadas en las comunidades autónomas -un factor generador de inestabilidad en los mercados de deuda- recalcó que cada territorio presentó un plan de reequilibrio «con nuevas medidas para reconducir esa cifra de déficit al objetivo» del 1,3% del PIB. A falta de conocer los datos de la ejecución presupuestaria regional del tercer trimestre, cree que la verificación «de que el consumo público se ha reducido nos permite constatar que estos planes han tenido algún efecto».