Jaaber antepone la fe al Zalgiris

Ibrahim Jaaber profesa como nadie aquello de que 'la fe mueve montañas' o lo de que 'el dinero no da la felicidad'. Y es que el jugador búlgaro nacido en Estados Unidos y con grandes creencias religiosas decidió, a través de una carta, abandonar el Zalgiris Kaunas lituano, un histórico del país báltico, y también el baloncesto europeo.

Está en contra de la publicidad de las camisetas, con anuncios de bebidas alcohólicas, y de los espectáculos de las atractivas 'cheerleaders' lituanas. Jaaber considera que los sensuales bailes de las animadoras en los 'tiempos muertos' y la propaganda exhibida en la Euroliga contravenía su fe musulmana.

"Comprendo que puede que nunca gane dinero con el baloncesto por esta decisión, pero estoy dispuesto a sacrificarme por mis creencias", dijo el base búlgaro. Su decisión ha cogido por sorpresa al club, que amenaza al jugador con demandarle.

No es la primera vez que antepone la fe al baloncesto ya que el verano de 2009 renunció a disputar el Eurobasket con Bulgaria porque el torneo coincidía con el ramadán.

Licenciado en 2007 después de cuatro temporadas en la Universidad de Pennsylvania, Jaaber no fue elegido en el 'draft' de la NBA y emprendió su carrera profesional en Europa. Jugó en el Egaleo griego (2007-08), la Lottomatica de Roma (2008-10) y el Armani Milán (2010-11) antes de pasarse la temporada pasada en blanco tras ser cortado por los Houston Rockets durante la pretemporada.

A las órdenes de Joan Plaza el base promediaba 5,9 puntos, 2,2 rebotes y 2,2 asistencias en casi 21 minutos en la Euroliga, siendo uno de los jugadores más utilizados por el entrenador español.