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Los chiringuitos pretenden abrir todo el año

La crisis económica y las bajas temperaturas del mes de julio han hecho que las pérdidas sean del 50%

MADRID Actualizado: Guardar
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Este verano no está siendo especialmente bueno para los chiringuitos de la costa de Huelva que están afrontando pérdidas de hasta el 50% debido a la crisis económica y a las bajas temperaturas del mes de julio y que ven como una solución a sus problemas el poder abrir todo el año.

El presidente de la Asociación Provincial de Chiringuitos de Huelva, Juan Díaz, ha indicado que este año "la cosa deja mucho que desear, ha habido una bajada en el negocio en términos generales y, en el que normalmente tiene una clientela de nivel económico más bajo pues apenas si llega a la mitad de los ingresos de 2011". Pese a esto, desde el sector confían en que con el mes de agosto y lo que pueda aprovecharse de septiembre se pueda "salvar" una "mala" temporada.

Una solución a estos problemas sería el poder abrir durante todo el año, algo para lo que muchos de ellos tienen, según Díaz, "serios problemas" porque de hacerlo estarían "clandestinos, sin papeles" al ser el canon que pagan, únicamente, para la temporada estival. A este respecto, el presidente de la Asociación Provincial de Chiringuitos ha lamentado que en España se da con respecto a este asunto "una situación lamentable" pues "se cuenta con un potencial que está machacado por leyes sin sentido". "La existencia de los chiringuitos debería de estar reconocida por ley donde se consideren necesarios para los ciudadanos, para el turismo y para crear riquezas y en la actualidad, con las leyes que hay, lo único que se está consiguiendo es reprimir el futuro, todo es incomprensible", ha manifestado.

Pese a que en 2010 la Dirección General de Costas comenzó con la regularización de esta actividad y existen ya establecimientos con licencias para abrir todo el año, lo cierto es que son aún muchos los que aún están con concesiones al margen de la legislación, con un máximo de veinte metros cuadrados para cada instalación, y pudiendo abrir sólo en verano, lo que contribuye, según Díaz, a "la precariedad del sector".