Chacón confía en capturar a los asesinos de los dos militares españoles muertos en Afganistán

La ministra de Defensa, Carme Chacón, ha alertado en el Congreso de los Diputados que la misión en Afganistán seguirá siendo "dura y arriesgada" hasta que se produzca la retirada completa de los militares españoles, que, según ha dicho, tendrá lugar "entre 2013 y 2014".

Chacón ha comparecido esta tarde ante la Comisión de Defensa de la Cámara Baja a petición propia, para ofrecer información sobre el último ataque que golpeó al contingente español el pasado 26 de junio, cuando la explosión de una mina al paso de un blindado acabó con la vida del sargento Manuel Argudin Perrino y la soldado Niyireth Pineda Marín, provocando heridas a otros tres militares más.

La ministra ha recordado que las investigaciones han desvelado que el artefacto que estalló llevaba "al menos 30 kilos de explosivo", es decir, era una "bomba de muy elevada potencia, la mayor de este tipo a las que se hayan enfrentado las tropas españolas en Afganistán".

Chacón ha explicado que, como en otras ocasiones, se inició una investigación a instancias de la Audiencia Nacional y ha asegurado que no se van a "escatimar esfuerzos para que quienes han segado estas dos vidas paguen con sus crímenes". Según ha dicho, los servicios de inteligencia cuentan con información sobre los insurgentes que operan en la zona y se sabe cuáles de estos grupos han adquirido capacidad para preparar y colocar este tipo de artefactos explosivos. "Las investigaciones siguen su curso para determinar los culpables directos, localizarles y detenerlos", ha insistido.

Al explicar las circunstancias del ataque, ha recordado que las tropas de la Fuerza Internacional de Apoyo a la Seguridad en Afganistán (ISAF) se están haciendo el control con las rutas Lithium y Ring Road, en el oeste del país, de las que "hasta hace un año los terroristas y otros delincuentes eran dueños". Al verse desplazados, ha dicho, "los delincuentes se defienden respondiendo de forma cada vez más violenta contra las tropas que patrullan estas tierras". "Y ese fue el caso el pasado 26 de junio", ha indicado.

Con todo, ha recalcado que hay "señales de mejoría" en la misión y, como ejemplo, ha indicado que "por primera vez en cinco años en los meses de mayo y junio de 2011 se ha reducido el número de ataques". Además, ha recordado que se están alcanzando los objetivos de número de militares y policías afganos formados, para que puedan asumir la responsabilidad de la seguridad de su país.

Transferencia de la seguridad en Herat

En relación a la situación de la misión, ha detallado los planes de la OTAN para llevar adelante este proceso de transferencia de la seguridad y ha anunciado que "se ha iniciado ya" en siete entes territoriales, entre ellos la ciudad de Herat, donde hay desplegados militares españoles. Esta estrategia, según ha dicho, no incluye "un relevo brusco", sino "una reducción progresiva de los cometidos de la ISAF".

Además, ha avanzado que la comisión que realiza las recomendaciones para el inicio del traspaso de la responsabilidad incluya a localidad de Qala i Naw (en Badghis), con presencia española, en su informe del próximo septiembre y al resto de la provincia a principios de 2012.

De esta manera, si este proceso -que se demorará meses- sigue su curso, en el primer semestre de 2012 se retirará el 10% de las tropas españolas, y en el primer semestre de 2013, el 40%, es decir, unos 600 efectivos. "El resto abandonaría el país entre 2013 y 2014", ha dicho, apuntando así a la posiblidad de que la retirada completa tenga lugar antes de 2014, como había avanzado el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, cuando adelantó el pasado junio el calendario de repliegue.

En cualquier caso, ha vuelto a recurrir a la máxima defendida en los últimos meses por el jefe del Ejecutivo, según la cual "los plazos son orientativos, pero los objetivos son irrenunciables". Así, ha dicho, los planes "están sujetos a la evolución de las circunstancias y, sobre todo, al cumplimiento de los objetivos de la misión".

Hasta que tenga lugar la retirada completa, ha remarcado, la misión seguirá siendo "dura y arriesgada", pero ha afirmado que los "riesgos" no van a "frenar la determinación" de España y sus militares, que continuarán realizando su trabajo "con el mismo valor, profesionalidad y entrega que estos nueve años".

Refuerzo de la seguridad

Además, ha dicho que el Gobierno seguirá "redoblando esfuerzos" para garantizar la protección de los militares españoles, aunque ha alertado de que "por muy elevada que sea la protección, siempre existirá riesgo".

Como ejemplo de las medidas implementadas para "reforzar las condiciones de seguridad" ha recordado el despliegue de los vehículos blindados Lince y RG31, que ofrecen "la mayor protección disponible contra los artefactos explosivos improvisados", con sistema de inhibición de frecuencia que son "actualizados a medida que aparecen nuevas amenazas".

Chacón ha precisado que en la actualidad las tropas españolas en Afganistán cuentan con 142 Lince y 74 RG31 y ha explicado que antes de que acabe 2011 se enviarán otros cinco Lince y dos RG31 suplementarios. Además, ha indicado que la formación que reciben los militares antes de viajar a Afganistán se actualiza "constantemente" a partir de las lecciones aprendidas. Así, ha revelado que, para garantizar al máximo la seguridad, las rutas de las patrullas de reconocimiento y vigilancia se deciden "la noche anterior".

También se ha referido al "refuerzo de las medidas de inteligencia", entre las que ha citado el despliegue de vehículos aéros no tripulados (UAV), que emplean durante sus movimientos en la zona de operaciones.

Según ha dicho, en la actualidad las tropas españolas tienen vehículos tipo 'Searcher' con capacidad infrarroja y un alcance de 80 km y de modo 'Raven', para vigilancia a distancias de hasta 10 km, que están "proporcionando información de máximo interés para las tropas de ISAF". Igualmente, se ha hecho un "gran refuerzo" de la seguridad en la Base de Apoyo Avanzado de Qala i Naw, inaugurada hace un año, y se ha proporcionado un "blindaje especial" a los helicópteros 'Cougar' en Herat.

En cualquier caso, ha insistido en que "nadie ni nada puede asegurar una protección total, y menos en un escenario como Afganistán, donde el riesgo es elevado". "Pero hacemos todo lo que podemos para evitar nuevas tragedias", ha afirmado la ministra, que previamente ha recalcado que las Fuerzas Armadas españolas "actúan en una misión que se está desarrollando en un escenario altamente arriesgado, de conflicto y guerra".