José Vega no tira la toalla pese a los problemas. / Javi Fergo
Xerez CD

José Vega: «A veces pienso que lo mejor sería que se acabara ya la temporada»

El jerezano está viviendo un calvario ya que apenas ha tenido minutos

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«Hay veces que pienso que lo mejor es que se acabe ya la temporada para empezar otra vez todos desde cero, pero la verdad es que te da pena tener que pensar en momentos puntuales que eso sería lo mejor». Así de dura es la realidad de un José Vega que está viendo como su sueño se ha convertido en una pesadilla. El jerezano volvía esta temporada al equipo de su tierra, al Xerez que le había visto crecer y venía con toda la ilusión del mundo a tratar de triunfar en la que él considera su casa, pero una extraña cadena de lesiones le ha tenido demasiado tiempo fuera de los terrenos de juego y ahora parece casi imposible entrar en una convocatoria, una auténtica quimera meter la cabeza en el equipo titular. Además, el destino le tenía guardado una mala pasada pues cuenta que «nunca había vivido algo así. Nunca. Lo hablo muchas veces con los amigos y la familia, les digo que nunca he pasado por momentos como este y ha tenido que ser aquí, en mi casa y con mi gente».

Pese a todo, aún no ha lanzado la toalla a la lona. Mantiene una pequeña esperanza, pues recuerda que «todavía hay partidos, ojalá que podamos entrar en el 'play off' y pienso que todavía hay cosas por disfrutar. Yo no pierdo la esperanza. Es cuestión de tiempo, de no perder la fe, de seguir entrenando y creo que a quien trabaja Dios le ayuda, por lo que ojalá que me llegue ese momento y pueda disfrutar de mi equipo, de la afición y de lo que es un partido de competición porque se echa mucho de menos». Y su carácter le hace guardarse sus problemas y tratar de poner buena cara incluso con sus más cercanos. Pese a todo, afirma que su familia también lo está pasando mal: «Mi mujer, mis niñas y mis padres son los que más lo sufren, pero intento no trasmitirle lo que yo siento. Trato de estar alegre y llevarlo por dentro porque de lo contrario podría amargarme en muchos momentos. Quiero estar lo mejor posible con ellos y esa rabia que tengo me la trato de quitar de encima en los entrenamientos o en los momentos que estoy solo».