Vista panorámica de Cuenca y Hoz del Húecar
Vista panorámica de Cuenca y Hoz del Húecar - Zarateman /Wikipedia

Diez planes para hacer una escapada en Semana Santa

En la playa o en la montaña, en la ciudad o en el campo, las vacaciones son el momento perfecto para desconectar de la rutina

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  1. Teatro en Almagro

    Almagro quiere unir turismo y teatro. Eso es lo que propone la Compañía de Teatro Corrales de Comedias para los fines de semana de esta primavera, disfrutar de la magia del teatro en un lugar único como es el Corral de Comedias de Almagro. Una atractiva actividad turística para los que se acerquen a visitar la villa de Almagro y una forma distinta de conocer nuestros pueblos, sus tradiciones y nuestra literatura.

    La villa de Almagro está unida de forma inseparable a su emblemático corral de comedias, el mejor ejemplo de escenario teatro del siglo XVII y que sigue activo lo que le hace ser un escenario teatral único en el mundo. Un lugar donde se siguen representando todos los fines de semana las mejores obras de teatro del Siglo de Oro además de clásicos europeos. La Compañía de Teatro Corrales de Comedias propone cada sábado descubrir este escenario privilegiado y disfrutar de los clásicos de nuestro teatro, unas funciones que estarán operativas hasta el mes de junio.

    Las obras se representan todos los sábados por las tardes y tienen un precio de 17 euros (15 euros si se compran anticipadamente) con descuentos para jubilados, grupos y entrada gratuita a niños menores de 8 años. Estos fines de semana están operativos desde el 25 de febrero hasta el 17 de junio.

  2. La magia de la «Ciudad encantada»

    Conocida por sus casas colgadas que asoman al río, Cuenca forma parte de esas ciudades españolas dignas de visitar, sobre todo, en primavera. De camino a las casas colgadas, el paseo por el camino de la hoz del río Júcar hará colmar de placer a la vista, olfato y tacto con paisajes de ensueño, a la par que se respira aire puro entre parajes naturales.

    La «Ciudad Encantada», denominada así debido a que en sus orígenes formaba parte del mar Thetis, permite contemplar el fenómeno geológico que propició su aparición. Para descansar en un ambiente de lujo, el Palacio del Infante Don Juan Manuel Hotel Spa, es un hotel histórico en Belmonte donde además se puede degustar la gastronomía manchega más sofisticada y visitar una bodega.

  3. Una casa rural para descubrir Asturias

    Asturias es conocido por su gran patrimonio natural. Playa y montaña se dan la mano para ofrecer al visitante entornos mágicos para descansar y olvidarse del mundo. Desde agradables paseos por la costa con magníficos arenales donde practicar deportes náuticos o relajarse al sol hasta rutas de montaña por los espectaculares Picos de Europa o el Parque de Somiedo, Asturias es un paraíso que invita a ser recorrido. Ciudades como Oviedo y Gijón o localidades de la talla de Llanes, Ribadesella o Villaviciosa permiten hacer un turismo activo y visitar enclaves históricos como la catedral de Oviedo o la Universidad Laboral de Gijón.

    La oferta gastronómica asturiana es otro de los puntos a tener en cuenta. Platos tradicionales como la fabada compiten con el marisco del Cantábrico, las carnes o las verduras.

    Para descansar y desconectar nada mejor que una casa rural en Amandi (Villaviciosa). Pensada para aquellos que busquen un entorno rural, La Parra es una vivienda de dos plantas con una estructura típicamente asturiana que permite disfrutar de un entorno tranquilo y planificar las excursiones por Asturias. La casa consta de cuatro dormitorios, tres baños, wifi gratuito, barbacoa y todas las comodidades propias de una residencia moderna sin perder el encanto de lo típicamente asturiano.

  4. Caballos en Ribadesella

    La Playa de Santa Marina en Ribadesella es el escenario de las espectaculares carreras de caballos con ejemplares pura sangre, cruzados y caballo español.

    El entorno privilegiado atrae a miles de aficionados y curiosos para sentir y disfrutar de la fuerza de los caballos y de la magia del paisaje.

    El viernes 14 de abril, se disputarán las carreras de las categorías tercera (caballos y yeguas pura raza árabe) y cuarta (caballos y yeguas mixtos) y el sábado 15 de abril se disputarán las carreras de las categorías primera (caballos y yeguas pura sangre inglés - PSI) y segunda (caballos y yeguas cruzados de PSI).

  5. Flora y fauna en Extremadura

    Con la llegada del buen tiempo son muchos los que buscan disfrutar de entornos naturales. Para dar la bienvenida a la primavera proponemos Los Llanos de Cáceres y la Sierra de Fuentes que conforman una de las áreas naturales más emblemáticas de la provincia de Extremadura, donde se localiza uno de los ecosistemas más importantes de la avifauna en España.

    Además de contemplar los hermosos cerezos en flor del Valle del Jerte, merece la pena desplazarse hasta el suroeste para visitar este complejo en primavera cuando las aves empiezan su periodo de cría, desplegando sus bellos plumajes.

    Para alojarse una opción de lujo es el Hospes Palacio de Arenales & Spa, un hotel de cinco estrellas situado en un edificio del siglo XVII, donde se puede, además, degustar la rica gastronomía extremeña.

  6. En bicicleta por la comarca de Sobrarbe

    En España tenemos la suerte de poseer un gran número de enclaves naturales preciosos que tienen cierta magia.

    Rodar en bicicleta por los caminos de la comarca de Sobrarbe te hará recuperar la energía. Pueblos de corte medieval, como Aínsa o Boltaña, el Parque Nacional de Ordesa o el cañón de Añisclo son perfectos para buscar un remanso de paz en Semana Santa al tiempo que se rueda por un gran número de rutas para hacer en bicicleta de las que te podrás recuperar probando la magnífica carne de los asadores de la zona.

  7. Semana Santa en la nieve

    España es uno de los mejores destinos para disfrutar del esquí en Europa. Nuestro país es el segundo más montañoso del Viejo Continente y las pistas de las estaciones tienen unas instalaciones de primer nivel. Eso unido a una nieve de calidad y muchas horas de sol durante el invierno convierten a las estaciones de esquí de España en uno de los destinos preferidos para Semana Santa.

    Son muchos los motivos para acercarse hasta las 34 blancas cumbres que se reparten a lo largo de toda la Península aunque Sierra Nevada, en Granada, Baqueira Beret, en Lérida y las aragonesas son las que cuentan con más visitantes.

    [Consulta el parte de nieve]

  8. Un día en el Oceanogràfic de Valencia

    Tras la ampliación del año pasado el Oceanogràfic de Valencia tiene muestra nuevas de especies e instalaciones. Entre las principales destaca la construcción del Cocodriliario del Oceanografic, un nuevo Mariposario, un nuevo hábitat para las Tortugas Gigantes de Aldabra –la segunda más grande del mundo-, la reforma integral de la zona del Ártico que ha permitido ver la Aurora Boreal proyectada en una inmensa cúpula, la mejora del delfinario con la construcción o la creación de nuevos hábitats en el aviario o el recinto de los pingüinos de Humboldt.

    El Oceanogràfic transmite al visitante una experiencia sensorial absolutamente novedosa, desde el mismo comienzo de la visita, gracias a todas las innovaciones divulgativas, científicas y tecnológicas introducidas.

  9. De turismo en Lisboa

    Lisboa es un destino cercano y no demasiado caro para los turistas españoles. La opción de llegar hasta la «ciudad de las siete colinas» en coche hace de este viaje un destino perfecto para disfrutar la Semana Santa.

    La capital de Portugal sorprende por su mezcla de estilos que se traducen en una mezcla de barrios con aire decadente pero encantador y una ciudad moderna a la vanguardia de Europa.

    Pasear por las viejas calles de los barrios de La Alfama, El Chiado y El Barrio Alto con su fantástico castillo de San Jorge hará que se olviden todas las preocupaciones para dejarse llevar por narraciones cargadas de historia.

    El barrio más comercial y emblemático de la ciudad es La Baixa, reconstruido por el Marqués de Pombal tras el terremoto del siglo XVIII. El toque modernos lo pone el Parque de las Naciones que se creó con motivo de la Expo de 1998.

    La ciudad esconde numerosos monumentos dignos de ser visitados como su catedral románica del siglo XII; el Monasterio de los Jerónimos; la Torre de Belém o el Castillo de San Jorge entre otros.

  10. Escapada cultural a París

    Hay infinitas razones para visitar París desde monumentos, ambiente, compras, jardines, planes en familia o gastronomía pero, sin duda, una de las más importantes es la cultural. Es difícil hacer la cuenta total pero la capital francesa ofrece al menos 170 museos de todo tipo, la mayoría de ellos dedicados al arte. Ahí está el majestuoso Museo del Louvre, seguramente el más importante del mundo, el Museo de Orsay, el Centro Pompidou, el Museo Rodin, el de la Orangerie, el de Arte Moderno, el Picasso o la Pinacoteca de París.

    Aunque no es necesario entrar en museos para respirar el arte y la cultura en París. A cada paso surgen obras maestras de la arquitectura, esculturas, fuentes, palacios, monumentos que jalonan la intensa historia de la ciudad. Recorrer París, cualquiera que se el itinerario, es hacer un recorrido cultural en el que el arte y la historia se funden para ofrecer su mejor versión.

    Pero como París siempre ha sido y sigue siendo una ciudad abierta, no es raro que en cualquiera de esos recorridos se descubran budas afganos, telas indias, tesoros de Angkor, armaduras de samurais, pinturas de China y Japón, como las que exhibe el Museo Guimet, el mayor museo de arte asiático de Europa, y como también París es una ciudad moderna se puede encontrar arte digital y bibliotecas futuristas en el centro Gaîte Lyrique.

    No hay tiempo para el aburrimiento en París. Hay museos dedicados a los vampiros y las criaturas legendarias, a las falsificaciones, al chocolate, al cine, a las muñecas, a la magia, a las catacumbas, a la moda, al vino, a las ferias y atracciones... Incluso hay uno dedicado al alcantarillado. No es precisamente arte, pero vale la pena dedicar unas horas a visitarlos y conocer un París distinto.

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