La ausencia de una edil del PP impide la reprobación de Perezagua

La ausencia de la concejal del PP Ana Isabel Bejarano impidió ayer que el Pleno del Ayuntamiento de Toledo reprobara a Rafael Perezagua, concejal de Movilidad y Tráfico, por su gestión en el contrato de autobuses urbanos. Se trataba de una moción de IU que contó con el apoyo del PP. Sin embargo, al faltar Bejarano la votación quedó en empate (12 a 12) y el voto de calidad del alcalde, Emiliano García-Page, rechazó la propuesta.

Para dar más «chicha» al asunto, mientras Aurelio San Emeterio, portavoz de IU, defendió la moción, todos los concejales del PSOE (con excepción del alcalde y del concejal Antonio Guijarro) se fueron del Salón de Plenos. La razón, explicó Guijarro, es que «hoy no se está reprobando al concejal de Movilidad, se está reprobando al portavoz del gobierno municipal, por eso todos somos Rafael Perezagua».

Guijarro añadió que «más que con el tráfico y la movilidad, (la moción) tiene que ver con la ORA, los presupuestos y otras cuestiones».

Por su parte, San Emeterio reprochó a Perezagua no haber hecho «lo único que tenía que hacer en esta legislatura: sacar un nuevo pliego de condiciones del servicio de autobuses urbano». Asimismo, cifró en 4.125.000 euros lo que el Ayuntamiento perderá con la prórroga de dos años del citado contrato, que entró en vigor el pasado 1 de enero. Para el concejal del PP Diego Vivas, el apoyo de su partido a la moción «no es porque exista ninguna pinza, sino porque la gestión del concejal de Movilidad en estos cuatro años ha sido tan penosa que no podemos más que apoyar a IU».

Apoyo a los conserjes

Por otro lado, el Pleno aprobó (con los votos a favor de PSOE e IU y la abstención del PP) una moción en la que se solicita al Ministerio de Defensa «que intervenga para garantizar la estabilidad del empleo en unas condiciones laborales dignas» de los conserjes del Museo del Ejército.

El concejal de Empleo, Antonio Guijarro, explicó que la nueva empresa concesionaria que presta este servicio de consejería, Proman Servicios Generales S.L., ha despedido a una parte de los trabajadores. Y con el resto «ha pretendido imponer un recorte salarial de 200 euros al mes a un salario de poco más de 70, en lugar de aplicar el convenio provincial correspondiente de Limpieza de Edificios y Locales».