El colegio Gaztelueta recuerda que el caso fue archivado «por falta de elementos suficientes» para acusar al profesor

La dirección del colegio Gaztelueta en Leioa (Vizcaya) ha asegurado este viernes que el centro "es el primer interesado en que se esclarezca toda la verdad" sobre los presuntos abusos sexuales sufridos por un alumno cuando tenía 12 años de edad y cuyo caso está siendo investigado por la Congregación para la Doctrina de la Fe después de la carta enviada por la familia de la víctima al Papa Francisco.

En un comunicado dado a conocer este viernes, el director del colegio, Imanol Goyarrola, asegura que el centro no tiene «ninguna noticia de las conclusiones de la investigación» ordenada por el Papa Francisco. Sin embargo, señala «que si los hechos» denunciados «se mostraran ciertos merecería una total condena» por parte del centro.

En este sentido, puntualiza que «tras la investigación del colegio, en octubre de 2011, los padres formularon una denuncia ante la Inspección de Educación del Gobierno Vasco, que también dio lugar a un procedimiento en la Fiscalía de Menores».

«Compromiso por llegar a la verdad»

Tras las diligencias de investigación abiertas también por el Fiscal Superior del País Vasco, «todas las instancias concluyeron que no había elementos suficientes para mantener la acusación contra el profesor y archivaron el caso», recuerda el director del centro, quien señala que desde el primer momento han intentado «estar en contacto con la familia del antiguo alumno, aunque ellos prefirieron romper la relación». «En todo este tiempo, ha sido muy doloroso comprobar el sufrimiento del antiguo alumno y de su familia, a quienes reitero nuestra cercanía y nuestro compromiso para llegar a la verdad de los hechos», añade.

El director además señala que teniendo en cuenta los resultados de la investigación civil, el colegio también «ha querido ser especialmente prudente en el respeto de la presunción de inocencia del antiguo profesor acusado». En este sentido, recuerda que el docente «ha colaborado con las autoridades y ha manifestado su deseo de poder defenderse ante los tribunales de unos hechos que considera completamente falsos».