Una mujer de 24 años y con depresión pide que le apliquen la eutanasia

Laura, una mujer de 24 años, comentó a sus doctores que sufría depresión desde que era una niña y deseaba acabar con su vida. Así lo recoge el diario belga De Morgen. «La vida no es para mí», sentenciaba Laura, quien ingresó en un centro psquiátrico con apenas 21 años.

«La muerte me acaricia, y no como una opción. Si tuviera la oportunidad, eligiría llevar una vida soportable, pero ya he intentado absolutamente todo y he fracasado», declaró al citado periódico.

Laura, que ahora mismo planea su funeral y las últimas palabras que tendrá para su madre y su abuela, afirma que sus padres eran demasiado jóvenes cuando la tuvieron. Y, aunque creció junto a sus abuelos en un ambiente de «seguridad, paz y estructura», no siente que esto haya sido suficiente.

«Pese a haber crecico en un entorno familiar estable, mi niñez ha contribuido de forma decisiva a este sufrimiento y estoy convencida de que mi deseo es morir».

En una extensa entrevista, Laura relata cómo con tan solo seis años de edad –y sin ser consciente de qué hacía– cogió una pistola cargada y pensó en acabar con su vida. «Si pudiera volver atrás, apretaría el gatillo».

La eutanasia en Bélgica

El día de la muerte de Laura no está decidido todavía. Lo único cierto es que, con su caso, aumenta el número de individuos de corta edad que buscan acabar con sus vidas.

Bélgica legalizó la eutanasia en el 2002. Desde entonces, el país ha sido testigo de unas 1.400 muertes de este tipo. En 2013, el mismo año en que el número de peticiones de muerte bate récord al elevarse hasta las 1.800, el Parlamento belga aprobó una enmienda a la ley que se extiende ahora a los niños con enfermedades terminales.