Un sanitario del el Hospital Presbiteriano de Texas, que puede haber estado en contacto con las muestras del primer paciente diagnosticado de ébola en Estados Unidos, ha sido aislado en un crucero a pesar de que no muestra síntomas de la enfermedad, según ha confirmado el Departamento de Estado este jueves.
El hombre no estuvo en contacto directo con el paciente de Liberia que finalmente falleció, Thomas Eric Duncan, pero sí podría haber procesado sus fluidos corporales hace 19 días, ha explicado la portavoz del Departamento, Jen Psaki, en un comunicado.
El sindicato de enfermeras del hospital ya denunció que éste no cuenta con protocolos frente a casos de ébola.
El temor sobre el virus y posibles contagios se han intensificado en Estados Unidos después de que dos enfermeras del mismo hospital de Dallas que atendieron a Duncan se infectaran de ébola, un virus que ya ha matado a casi 4.500 personas, la mayoría en África Occidental. Además, el Gobierno del presidente Barack Obama se está enfrentando a fuertes críticas de la oposición sobre sus esfuerzos para contener la enfermedad en el país.
El hombre, que a día de hoy no tiene fiebre ni muestra ningún otro síntoma de la enfermedad, se estaba controlando la fiebre a sí mismo según la monitorización oficial desde el lunes, tal y como se ha informado en el comunicado. Aún así, ha decidido voluntariamente aislarse junto a su acompañante en su camarote mientras que especialistas estadounidenses trabajan para que el barco regrese a Estados Unidos de forma segura. «Estamos trabajando con la línea de cruceros para llevar al barco de vuelta a Estados Unidos con seguridad y tomando todas precauciones», ha dicho Psaki.
El trabajador sanitario salió del país antes de que le notificara su posible contacto a los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), un requisito para comenzar la vigilancia activa.
