«Mi reto es aprender a comer bien y eliminar alimentos de forma permanente»

Tras recibir las primeras pautas de alimentación, Eugenio comienza a adentrarse de lleno en su proceso de pérdida de peso. Una etapa que consistirá en ir mucho más allá. El objetivo es aprender a comer. Lograr una reeducación alimenticia. Hablamos con él para comprobar cómo está manejándose los primeros días y cuáles son las dificultades con las que está encontrando. Además nos explica con más detalle los motivos por los que ha emprendido este reto.

- ¿Por qué decidiste lanzarte a este reto? ¿Qué deseas conseguir?

La respuesta no es una, sino múltiple. Primero el cansancio de miles de regímenes de pérdida de peso, que acaban con resultado estéril, y que supone más kilos en la báscula que cuando se empieza.

Segundo, el reto de poder aprender a comer bien, pues desde el principio se ha dejado claro que éste es un proceso de reeducación alimentaria, es decir comer bien, para no volver a coger peso. Tercero, el prestigio de la clínica Quirón, no me lo pensé dos veces cuando leí el nombre de la institución implicada en el proceso. Deseo conseguir lo que quiere todo el mundo, estar en mi peso y mantenerlo de por vida.

- ¿Lo habías intentado muchas otras veces?

Cientos de veces, y de todas las formas posibles, excepto la dieta de la anchoa, pues no me gusta este alimento

-¿Cuáles fueron las principales dificultades?

En la mayoría de los procesos de pérdida de peso iniciados, a la segunda/tercera semana se me hacía muy difícil continuar. Y aquellos que conseguía una pérdida de peso, en cuanto terminaba la dieta, recuperaba rápidamente los kilos perdidos.

-¿Y cuáles son las dificultades que tienes actualmente?

La mayor dificultad que estoy encontrando es la de poder estructurar bien las cenas, tener que pensar por adelantado. Es cierto que es un tema de un poco de organización, pero por el resto, lo estoy llevando muy bien.

- ¿Cuál dirías que va a ser tu mayor reto?

Mi mayor reto va a ser que mi familia no sufra las consecuencias de mi proceso. Evitar los cambios de humor. Mi reto es aprender a comer bien, y eliminar alimentos de mi vida de forma permanente, al igual que malos hábitos.

- ¿Cómo te estás sintiendo los primeros días?

Muy bien, de hecho no me está costando mucho. Se hacen muchas comidas. Además estoy comiendo muy variado y mucha fruta y verdura. Es un poco pesado tener que ponerse a cocinar/preparar las cosas la noche anterior, pero desde luego el esfuerzo está mereciendo la pena.

-¿Cómo evoluciona el manejo de la ansiedad?

Comiendo cosas permitidas, es decir, un par de mandarinas, unas tortitas de avena y arroz, un par de quesitos light. Pero sobre todo mirando mi barriga, y acordándome de mi objetivo.

-¿Qué es lo que más te va a costar?

La constancia

-¿Y qué es lo que más te está ayudando para seguir adelante?

El deseo de poder «ser normal» en este aspecto. El hecho de que también estoy haciendo mucho ejercicio es algo que me está motivando también.

-¿Qué tal la relación con los doctores? ¿Qué cosas has aprendido en estas primeras consultas?

Estupenda, no tengo palabras para describirles tanto a nivel profesional como personal. Estoy aprendiendo muchas cosas, pero sobre todo a no dejarme llevar por modas alimenticias, y que comer bien, no es otra cosa, que comer, más o menos, como lo hacían nuestras abuelas. Es decir, buenos pucheros, carne, pescado, fruta y verdura. ¡Ah! Y el pan!!! Estoy comiendo muuucho pan, más que en toda mi vida. Entre 150 y 160 gramos al día, es decir 2/3 de una barra de pan integral.