san fernando
El calor y el levante se adueñan del miércoles de feria en San Fernando
Las altas temperaturas impidieron que los vecinos de San Fernando acudieran pronto al parque Almirante Laulhé
El miércoles de feria en San Fernando estuvo marcado por las altas temperaturas y el levante. La jornada comenzó pronto, a las 13.00 horas, ya que durante toda la festividad habrá un Dj en un pequeño escenario para animar el parque Almirante Laulhé desde bien pronto, aunque a pesar de la buena incitativa del Ayuntamiento, y con la confianza de que los vecinos se dejarán ver pronto por el recinto ferial, los más de treinta y cinco grados que hacía por la tarde y el fuerte viento se tradujeron en casetas prácticamente vacías con alguna excepción.
A medida que pasaron las horas y las temperaturas se suavizaron comenzó a haber mayor presencia del público, aunque era en la zona de Caño Herrera, donde se encuentran las atracciones donde había más isleños, sobre todo los más jóvenes que querían aprovechar la tarde del miércoles, a pesar de que el martes fue el día del niño.
Mientras en Caño Herrera los padres acompañaban a los hijos a que se montaran en los cacharritos, en el parque Almirante Laulhé la academia de baile de San Fernando daba un espectáculo y una hora y media más tarde, a las 21.30 horas arrancaba un concierto de Luis de Perikín.
Al igual que ocurre en muchos mercados gastronómicos, el Ayuntamiento facilitaba unas mesas y sillas de madera en el centro del parque para que los isleños y demás visitantes a la feria pudieran consumir bebidas de cualquier caseta.
Claudia y Carla, dos amigas que se reencontraban tras varios meses sin verse se «tomaban el primer rebujito antes de ir a casa a cambiarnos para la noche».
«Ayer vinimos por la noche con los amigos y la verdad es que nos lo pasamos muy bien con el Dj, y hoy tenemos la misma idea, pero estábamos aburridas en casa, y antes de irnos a una cafetería, pues ya que estamos de feria, aprovechamos», comentan.
Según dicen, muchos jóvenes estuvieron haciendo botellón en Fadricas, al lado de la zona de las atracciones. «Un lote nos cuesta cinco o seis euros por persona, que es el precio de una maceta».
La presencia de jóvenes en Fadricas advertían de la peligrosidad de la presencia de botellones entre las calles del polígono. « Es un centro de trabajo y en sus calles hay un constante trasiego de camiones, furgonetas y vehículos para traer o retirar de las naves industriales y locales comerciales todo tipo de mercancías. Estar en sus calles bebiendo y obstaculizando el tránsito de los vehículos pone en grave peligro su integridad física ya que pueden ser atropellados».
«Tememos que los botellones que se producían en el paseo marítimo de La Magdalena se trasladen al polígono en estos días de fiesta», decían en un comunicado.
Los familias comenzaban a dejarse ver por Caño Herrera para montar a sus pequeños en las atracciones. Jorge, padre de dos hijas, Carlota y Paloma, las monta en unos pequeños troncos de agua. «La madre está trabajando y yo las traigo un ratito, y ya a partir del sábado iremos a las casetas a cenar todos juntos».
«Es un coñazo que las atracciones estén tan lejos de las casetas, creo que han puesto un autobús, ¿no?, pero andando son casi veinte minutos, y con dos niñas pequeñas, se tardan casi cuarenta».
Llegó la noche, y con ello, el rebujito, la cerveza y el tinto de verano dejaron paso al cubata, las sevillanas al reguetton y los adolescentes se hicieron con el control del parque.
El ritmo latino se adueño del recinto ferial y San Fernando vivió una larga noche de feria. Este jueves el protagonismo lo tendrá la mujer, y de nuevo se prevé una jornada de calor y levante.
