Finaliza la restauración de la portada principal de la iglesia de San Antonio

La propia parroquia de San Antonio fue la que puso en marcha una actuación muy necesaria ya que la portada del templo sufría desde hacía años los problemas más frecuentes de los edificios históricos en las ciudades debido a la contaminación atmosférica, los gases de los combustibles o las acciones de las aves, cuestión esta última que resultaba especialmente llamativa en este caso.

La portada barroca de la iglesia de San Antonio de Padua es de piedra arenisca, la que habitualmente se empleada en muchos edificios monumentales y como principal patología presentaba la «arenización» de la piedra, que, según los expertos es el desplazamiento de las sustancias cementantes de la roca, que se disgrega, quedando en forma de arena.

Tal y como se anunció en su día, y una vez realizado el diagnóstico previo los trabajos de restauración de esta magnífica portada se iniciaron con una revisión del exterior de los sillares y elementos decorativos y retirando las piezas en mal estado o con peligro de desprendimiento. Posteriormente comenzó la restauración propiamente, centrada especialmente en la limpieza generalizada de la suciedad, aplicación de herbicidas, reposición de grietas y llagas con morteros y reconstrucción de las zonas más afectadas.

Fue a principios de agosto cuando comenzó la ejecución de esta obra por la empresa Cantero Artesanos Alemnara SL por un importe de 80.982,63 euros y con la participación de los restauradores gaditanos Pilar Morillo y Álvaro Domínguez. Desde entonces, el acceso a San Antonio se realiza por la calle Zaragoza. Pero ahora ya por fin, en esta Cuaresma, el templo volverá a abrir las puertas de su recuperada fachada principal.