Sábado Deluxe

Ágatha Ruiz de la Prada confiesa la única vez que salió llorando de una casa

La diseñadora se sentó por segunda vez en cuatro meses en el plató de «Sábado Deluxe» y se proclamó la «triunfadora del confinamiento» por haber vendido 500.000 mascarillas en menos de una hora

Ágatha Ruiz de la Prada y su hija Cósima, durante la entrevista de anoche Telecinco

Novo

Por segunda vez en cuatro meses, la diseñadora Ágatha Ruiz de la Prada se sentó en el plató de «Sábado Deluxe». Esta vez lo hizo con su hija Cósima .

«Me nombraron la triunfadora del confinamiento», proclamó la diseñadora ya al principio de la entrevista. Ella asumió gustosa esa etiqueta, que le adjudicó una revista. Y lo hizo por dos razones. Por haber vuelto a encontrar el amor, puesto que tras romper con el «chatarrero» (él prefiere que se refieran a él como «reciclador») sale ahora con el ejecutivo Luis Gasset . Y la segunda razón es que vendió «medio millón de mascarillas en menos de una hora«. »¿Tú tienes? Es que se acabaron todas», preguntó a Jorge Javier Vázquez . Hablaba de su colaboración con con una cadena de supermercados para poner en el mercado mascarillas solidarias con el objetivo de recaudar fondos para Save the Children .

Grande de España y poseedora de dos títulos nobiliarios ( «vengo de una familia que no ha trabajado en generaciones»), se sigue declarando muy monárquica y juancarlista. Y es que a su edad (el próximo miércoles cumple 60 años) le dan igual las modas y el qué dirán.

Políticamente incorrecta, reconoció que haberse pasado un tiempo encerrada no le ha venido mal: «Si no llega a ser porque tengo muchos amigos que han estado enfermos, que algunos se han muerto; y, por lo profesional, porque pensé que nos íbamos al carajo... Estar meses confinado es lo mejor que me ha podido pasar. Yo he estado con mis perros, con mis ovejas, con mis gallinas. Hemos estado en contacto con la naturaleza», reflexionó.

Cósima, ayudante de Álvarez de Toledo

Cósima (29 años) se pasó toda la noche con el freno de mano echado. Sin entrar nunca al trapo y pensándose mucho las respuestas. «No le he perdido ni una onza de respeto a mi padre», quiso dejar claro. «Estás hablando como un político», diagnosticó acertadamente JJ.

Cuando el presentador dijo eso, la madre de la muchacha recordó en ese momento que de pequeña su hija quería ser política, y ya de mayor trabajó como ayudante –no detallaron cuánto ni en concreto en qué consistía el trabajo– para Cayetana Álvarez de Toledo , portavoz del PP en el Congreso de Diputados . «Me encanta Cayetana. Soy fan de Cayetana. Posiblemente, se ha radicalizado un poco, pero no culpo a Cayetana, sino al ambiente político», afirmó la joven.

«El Innombrable» (así se refiere Ágatha al que fue su pareja durante 30 años) ocupó buena parte de la entrevista. Cósima confesó que vio hace seis años el famoso vídeo de su padre, detalle del que se enteró durante el programa su madre, que confesó haberlo contemplado «muy por encima». «A mi padre le drogaron para hacer ese vídeo trampa. Estoy orgullosa de mi padre porque no se dejó sobornar», defendió Cósima . «Considero que mi padre es perfecto», zanjó. Se siguió hablando del asunto un buen rato, hasta que llegó una pausa publicitaria y su hija hizo a Ágatha un gesto con el que le indicó que era mejor zanjar el tema. Al regreso de los anuncios ya hubo, en efecto, cambio de tercio.

Cósima Ramírez sonríe durante la entrevista Telecinco

Una mujer bisexual

No fue el único momento en que salió el tema de la sexualidad. En repetidas ocasiones, Cósima ha revelado que es bisexual. Ayer lo hizo de nuevo.

Esta condición, y su debate sobre ella, propició uno de los momentos de la noche. Fue cuando Ágatha recordó una pareja que llevó en su día a casa, y presentó a sus padres (entonces juntos) y su hermano. «Una novia de mi hija nos encantaba a todos: era simpática, educada, misteriosa… Me hubiese gustado para tener un hijo... con Tristán ». Tristán es, claro, el hermano de Cósima .

Lady Foster

La diseñadora reconoció que ha conocido a mucha gente famosa e interesante a lo largo de su vida, tanto antes de conocer a «El Innombrable» como durante su relación. Y de toda la gente de gran nivel de vida ninguna le impresionó más que «Lady Foster» y, en concreto, su casa.

«Una vez me invitó a su casa en Londres . Es la única vez que me he ido de una casa llorado», reveló. «¿Por qué te fuiste llorando?», preguntaron al unísono los colaboradores del «Deluxe», esperando quizá que les contase alguna historia de humillación... Pero no. No es el estilo de Elena Ochoa . «Lloré porque no me quería ir de esa casa», dijo, y en el plató estalló una carcajada generalizada. La recordaba maravillosa e inmensa, «con 4.000 metros cuadrados de salón», exageró. «Lady Foster me fascina muchísimo», concluyó.

En el otro extremo, el de los famosos que preferiría no haber conocido, figura un ilustre escritor, premio Nobel para más señas. «Me defraudó muchísimo cuando conocí a Gabriel García Márquez . "Cien años de soledad" es el mejor libro del mundo, lo he leído 20 veces. Pero él iba mal vestido. Y no era nada simpático».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación