La sirenita

Ariel es una joven sirena que siente una enorme curiosidad por estar en tierra firme y conocer a los humanos. Pero su padre, el Rey Tritón, le impide cumplir su sueño. Cuando salva al príncipe Eric de un naufragio y se enamora de él, su deseo se convierte en una obsesión, así que acude a la bruja Úrsula para que le ayude. Gracias a un hechizo, consigue cambiar su cola y sus aletas por unas piernas y salir del mar, pero lo que la sirenita desconoce es que la bruja tiene unas intenciones muy oscuras.

Basada en el cuento de Hans Christian Andersen, esta película cosechó un éxito tan espectacular que supuso el resurgir de la factoría de Walt Disney, estudios que iniciaron una época dorada en la que aparecieron títulos como "La bella y la bestia", "Aladdin" o "Pocahontas". Gran parte de su éxito se debe a la banda sonora, de la mano de Alan Menken, que fue merecedora de dos Oscars. Otro aspecto a destacar es la innovación que hizo en las técnicas de animación, tanto en la creación de la tormenta en la que se hunde la galera como en la ambientación de toda la película en el mar, que fue un gran reto para la Disney.