La criatura perfecta

En una Nueva Zelanda imaginaria en la década de 1960, los seres humanos y los inmortales viven en armonía, representando éstos últimos la siguiente fase en la evolución humana. Cuando Edgar, un vampiro renegado, decide alimentarse con la sangre de un mortal, la iglesia envía a Silus para atrapar al vampiro y restablecer el delicado equilibrio que siempre había reinado en la comunidad. Silus contará con la ayuda de Lilly, una capitana de policía que no está dispuesta a que ningún otro ser humano muera.

Película de acción y ciencia ficción que intenta innovar dentro del género del vampirismo al presentar una sociedad retrofuturista en la que estos legendarios chupasangres y los simples mortales coexisten en paz. Protagonizan Dougray Scott ("Misión imposible 2", "El juego de Ripley") y Saffron Burrows ("Troya", "El gran golpe"). El papel del malvado Edgar fue originalmente otorgado a Jonathan Rhys-Meyers ("Los Tudor"), aunque se vio forzado a abandonar la producción por otros proyectos. Su puesto fue ocupado por Leo Gregory ("Tristan + Isolde").