El retraso de las obras de la calle Larga desata la «preocupación» del comercio

Los baches de la calle Larga permanecen incólumes casi un mes después de que el primer teniente de alcalde, Pedro Pacheco, anunciara que los trabajos de remodelación iban a iniciarse «inmediatamente» ante el deterioro provocado por «el intenso tráfico humano» de la arteria comercial. La presidenta de la Asociación de Comerciantes del Centro de Jerez Acoje, Charo Babot, reconoció que existe «preocupación» entre los propietarios de negocios de la zona.

«El plazo que nos indicó la Gerencia Municipal de Urbanismo no se ha cumplido pero esto depende ahora del Ayuntamiento», manifestó Babot, que recordó que el acuerdo consensuado entre el Consistorio y su asociación estipulaba que las obras comenzarían en junio para estar listas en septiembre, y no interferir con las Fiestas de Otoño y el regreso a los colegios.

«Creo que esta semana debemos tener ya noticias, porque ya tenían que estar comenzadas».

Afectados

El presidente de la Asociación Unión de Comerciantes Asunico, Manuel García, fue más allá al afirmar rotundamente que «nos va a coger el toro». «Lo mejor sería dejarlo para el año que viene porque entre pitos y flautas, ya nos plantamos en el mes de agosto», destacó García, que lamentó que el primer teniente de alcalde sólo se haya dirigido a Acoje para consensuar los trabajos.

«Las obras les afecta a algunos de nuestros asociados y están también muy preocupados», insistió el presidente de Asunico, que criticó que se esté utilizando los intereses de los comerciantes como «arma política».

Según la previsión de las obras, los trabajos debían haber comenzado a principios de junio por el extremo de la calle más cercano a la plaza del Arenal. Para no perjudicar al comercio, la Gerencia Municipal de Urbanismo había acordado con Acoje que la remodelación se realizaría por tramos, con el fin de no levantar toda la calle a la vez. El objetivo era retirar el pavimento de pizarra instalado cuando se peatonalizó la calle Larga hace una década, que ha sufrido un deterioro alarmante al no poder soportar el tráfico de camiones de limpieza y de los vehículos pesados que descargaban en los comercios.