PUERTO REAL

El PSOE acusa al alcalde de llevar el Ayuntamiento como «su propio cortijo»

Aseguran que el Gobierno adelanta varios temas para garantizarse la mayoría absoluta

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La portavoz socialista Ana Mosquera calificó de «cacicada» el Pleno extraordinario convocado por el ayuntamiento puertorrealeño para hoy. En él se abordarán tres temas: la aprobación del acuerdo con la Seguridad Social para el saneamiento de la deuda, los pliegos de condiciones para adjudicar la gestión de las nuevas piscinas y la liberación del nuevo concejal de IU, José Garrido. Los dos últimos de estos asuntos ya estaban recogidos como puntos del pleno ordinario de este jueves.

Mosquera explicó que la única razón para adelantar estos temas se debía a que el nuevo concejal del grupo municipal socialista, Antonio Hernández Leyton, «no toma posesión de su acta hasta el pleno ordinario del próximo jueves, y adelantando estos dos puntos evita que la oposición pudiera tumbar alguna de sus propuestas».

La socialista manifestó que « de igual manera podría haberse adelantado la toma de posesión, pero en ese caso, «no tendría la ventaja desleal que el alcalde busca». Para la portavoz «el asunto huele muy mal» y aclaró que con esto «sólo se consigue arrojar sospechas sobre los temas que el equipo de gobierno quiere aprobar con este proceder tan antidemocrático».

Diferencia de criterios

El nuevo concejal socialista, el representante de Los Verdes Antonio Hernández Leyton, cubrirá el puesto dejado en el grupo socialista por la concejal Sonia Bocanegra. Este veterano político local solicitó su acta de concejal «hace casi un mes», según recordó la responsable socialista, mientras que el concejal del equipo de gobierno José Garrido, quien sustituyó a la renunciante María del Carmen Flores, «tardó apenas dos semanas en obtener su acta, todo un récord en la historia de este Ayuntamiento», por lo que denunció la diferencia de criterios.

Estos argumentos llevaron a la portavoz socialista a acusar al máximo responsable de la corporación, José Antonio Barroso, de «retorcer los reglamentos y manipularlos a su antojo para burlar el espíritu democrático de la institución, y poder gobernar así como le da la gana, como si esto fuera su cortijo o un Ayuntamiento de los tiempos de Franco». Una dura acusación al proceder municipal que a buen seguro tendrá respuesta hoy en el hemiciclo plenario.