Los sindicatos, más divididos que nunca

uando se cumplen cuatro décadas de la legalización de los sindicatos en España, hoy, 1 de mayo, vuelven a salir a la calle. Aunque lo harán con mucha menos fuerza que entonces, divididos y con cada día menos afiliados. De hecho, al igual que ocurriera el año pasado, en Cádiz hay dos convocatorias distintas. Una, la realizada por los dos mayoritarios, Comisiones Obreras y UGT, que transcurrirá por la avenida principal de la ciudad. La segunda, convocada por los minoritarios, como Autonomía Obrera, CTA, CGT, SAT o Ustea, irá desde San Severiano hasta el Cerro del Moro.

Ahora que España empieza a salir de la crisis y el panorama laboral mejora cada mes, es cuando se antoja más necesario que nunca la existencia de unos sindicatos de trabajadores fuertes, unidos, que luchen de verdad por que haya más y mejor empleo.

Pero la realidad es bien distinta. En el caso de los mayoritarios, sobre todo la Unión General de Trabajadores, la desconfianza hacia ellos es máxima. No en vano, en los últimos años se han visto salpicados por algunos casos de corrupción. Y lo que resulta aún más sorprendente, han aplicado a sus propios trabajadores la última reforma laboral aprobada por el Gobierno pese a haberla criticado con dureza y haber convocados hasta dos huelgas generales para exigir su eliminación.

Pero vivimos años de convulsión política, protagonizada fundamentalmente por los populismos que encarna Podemos, que se han apropiado del discurso que tradicionalmente defendían los sindicatos.

Así pues, hoy se espera que sean pocos los que decidan acudir a las manifestaciones y muchos los que opten por tomarse el día como un festivo más y aprovechar para ir a la playa o a cualquier otra actividad de ocio.

Serán los propios sindicatos los que tengan que reflexionar sobre la crisis que viven y la falta de confianza que en ellos tienen la inmensa mayoría de los ciudadanos, equiparable a lo que ocurre en la propia política. Sólo así recuperarán el músculo que tenían hace años y servirán de nuevo para que los trabajadores mejoren poco a poco las condiciones laborales más dignas posibles.