SEMANA SANTA 2018
El nombre propio de lo cofrade
Pocos lugares viven de forma tan intensa la Semana de Pasión como Jerez, siendo una de las citas imprescindibles para ver cortejos en Andalucía
En Cádiz, la Semana Santa se vive de una manera especial y diferente es Jerez. Uno de los rincones donde se muestra mayor fervor, devoción; donde la Pasión se siente de manera intensa en sus calles. Es una cita ineludible para los cofrades de toda Andalucía, donde la saeta se ha hecho arte, donde se combinan en cada día diferentes estilos a la hora de realizar la salida procesional. En un entorno tan característico, como es el casco histórico jerezano. Todo ello combinado con un patrimonio cofrade indescriptible y casi imposible de enumerar. En definitiva, que la Semana Santa en Cádiz se recoge en Jerez.
Además, es una Semana Santa viva que se adapta a los nuevos tiempos y que incluye novedades. De esta manera probará en parte de su carrera oficial un tratamiento antiadherente para la cera de las velas. Una labor que se realizará el Sábado de Pasión y el Miércoles Santo a las siete de la mañana. Las ventajas de aplicación de este líquido es que permite a las máquinas barredoras quitar fácilmente la cera vertida por las velas de las distintas procesiones una vez que se limpia la Carrera Oficial cada noche tras el paso de la última procesión.
Pero como se ha expuesto ya antes, hay algo que diferencia a Jerez del resto de municipios andaluces con respecto a la Semana Santa y es su carácter flamenco y su forma de entender la saeta. Un palo al que se le quiere dar todavía mayor presencia este año, por lo que se ha puesto en marcha una iniciativa denominada Saeta Flamenca ‘Al Paso’.
Se trata de una iniciativa que está organizada por el Clúster Turístico Destino Jerez y la peña flamenca ‘Buena Gente’ contando con la colaboración, entre otras instituciones, del Ayuntamiento de Jerez y la Diputación de Cádiz. Un evento que se celebrará durante la Semana Santa de 2018, ofreciendo hasta 26 saetas en 10 localizaciones dirigidas a 11 hermandades.
Uno de los objetivos de este proyecto es que la Semana Santa de Jerez es que pueda ser declarada de Interés Turístico Internacional para lo que se precisa de una decena de impactos en medios escritos internacionales. «Esta iniciativa puede ayudarnos a conseguir este requisito que nos queda por cumplir por lo que le vamos a dar la máxima difusión», expuso la alcaldesa, Mamen Sánchez cuando se presentó la propuesta. Así de claro y contundente, Jerez quiere dar un paso más y que su Semana Santa tenga la categoría de Fiesta de Interés Internacional.
Elementos no le faltan, puesto que son multitud de pasos los que componen la Semana Santa jerezana y sus jornadas se alargan hasta altas hora de la madrugada. Una fiesta que en Jerez se vive de otro modo, que se siente de una forma muy particular y que por ello tiene una consideración tan especial.
A ello se debe unir su patrimonio. Los orígenes de las actuales cofradías de la Semana Santa Jerezana hay que buscarlos en el siglo XVI. Es en esta centuria cuando se fundan las primeras hermandades cuyo fin era hacer penitencia pública durante los días más señalados de la cuaresma. En origen las cofradías de penitencia que se fundaron en Jerez fueron muy humildes, pero poco a poco su peos artístico comenzó a ser considerable. Ya en el XVII se realizaron importantes obras para salir en procesión por las calles jerezanas, tales como el Cristo de la Esperanza o Jesús Nazareno, siendo el XVIII el siglo de esplendor del arte cofrade jerezano, con tallas como el Señor del Prendimiento, Nuestro Padre y Señor de las Penas y las Vírgenes de la Amargura, el Desconsuelo, Los Remedios, el Mayor Dolor y el soberbio conjunto del duelo de Nuestra Señora de la Piedad. En el siglo XX se vivió una nueva época de esplendor y a recuperar también su estilo. Los desfiles pasionales jerezanos habían llegado a tener una forma característica que se fue perdiendo influenciada por modas que pretendían equiparar a las cofradías jerezanas con las de Sevilla. En esta época llegan los grandes pasos de misterio, los grandes palios (en algunos casos bordados por artífices de la talla de Rodríguez Ojeda), la plata y la pléyade de figuras talladas por escultores como Castillo Lastrucci, los Chaveli o el soberbio Ortega Bru. Todo ello hace que la Semana Santa de Jerez cuente con un gran interés desde el punto de vista artístico, ya que ha sabido conservar una buena parte de su historia en los desfiles procesionales, a los que ha sabido añadir con gran tino nuevos elementos que han contribuido a hacerla una de las mejores no sólo de Andalucía, sino de España.
Los estrenos
Éste patrimonio se enriquece cada año, porque con tantas hermandades resulta hasta complicado atender a la cantidad de estrenos y novedades que se producen en cada día de Pasión.
Pero, para este 2018 hay que destacar la incorporación de nuevo atributos en las cruces de guía de la Salud de San Rafael y la Misión y el guión de esta última. Además, la corporación de Picadueñas añadirá a su misterio a Nuestra Madre y Señora del Encuentro y la Entrega hará lo propio con las imágenes de dos romanos y un caballo. Y es que es otro elemento a tener en cuenta la grandiosidad de sus conjuntos escultóricos, que ya hacen llamativa de por sí la Semana Santa jerezana.
La Hermandad de las Tres Caídas integrará un tercer paso a su cortejo, en el que procesionará el Santísimo Cristo de la Salud, y la Hermandad de la Cena restituirá la antigua corona de Santa María de la Paz de manera simbólica, ya que la anterior pieza fue sustraída el año pasado. La Hermandad del Perdón seguirá trabajando en la culminación de su paso de misterio, que perderá los cuatro hachones y los faroles en detrimento de unos candelabros de guardabrisas.
Y así se puede continuar en un suma y sigue, porque la Semana Santa de Jerez genera un gran impacto, no solo a nivel social sino también económica teniendo una industria alrededor que depende de una semana.
Y los jerezanos ya cuentan las horas para que de nuevo los cortejos estén en la calle, mirando al tiempo por la inestabilidad de los primeros días y con la esperanza de que se pueda vivir una Semana Santa completa en la que los pasos vuelvan a lucir y se pueda seguir avanzando para conseguir la atención internacional sobre la ciudad. La Pasión de Cristo es la pasión de Jerez.
