Corea del Norte: su producción alimentaria desciende por primera vez desde 2010

La producción total de alimentos en Corea del Norte -incluyendo cereales, soja y patatas- se estima que ha caído en 2015. Se trata del primer descenso desde 2010 y se prevé que empeore la seguridad alimentaria del país, según un informe actualizado publicado por la organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura ( FAO) y la Unión Europea.

El año pasado, la producción alimentaria total en la República Popular Democrática de Corea se estimaba en cerca de 5,4 millones de toneladas, frente a 5,9 millones de toneladas en 2014, con una disminución del 9%.

En particular, la producción de arroz con cáscara -principal alimento básico del país- se redujo en un 26%, a 1,9 millones de toneladas, debido, sobre todo, a la falta de lluvias y la baja disponibilidad de agua para riego.

El informe también señala que el suministro de fertilizantes y combustible en 2015 limitó la producción agrícola en ese año.

Los períodos secos recurrentes desde julio de 2014, también tuvieron un impacto negativo en la producción de maíz, el segundo cereal más importante del país. A pesar de un aumento de la superficie sembrada, se estima que la producción de maíz ha disminuido en un 3 por ciento, a 2,29 millones de toneladas en 2015.

La previsión de la FAO sobre las necesidades de importación de cereales del país para la campaña comercial 2015/16 (noviembre-octubre) asciende a 694.000 toneladas. Se calcula que 300.000 toneladas sean cubiertas por las importaciones del gobierno, pero el déficit sin cubrir de 394.000 toneladas representa la mayor cantidad desde 2011/12.

Las estimaciones se basan en las cifras de producción oficiales y los análisis del Sistema mundial de información y alerta de la FAO (SMIA) en colaboración con el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea (JRC, Joint Research Centre)

Teniendo en cuenta la escasez de suministros de alimentos en 2015/16, se espera un deterioro de la seguridad alimentaria del país asiático respecto al año anterior, cuando ya se estimaba que la mayoría de los hogares tenían niveles de consumo de alimentos escasos o en un nivel límite.