Isabel Grañeda, sobrina de Julián Muñoz, imputada en el caso de la Ciudad del Fútbol

El caso de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, cuyo juicio oral se desarrolla los días 14, 15 y 16 de abril, implica de forma directa a ocho miembros de la entonces Junta de gobierno municipal -dos permanecen todavía-, acusados de desobedecer una sentencia de 2004 y otras posteriores. Entre los imputados, figura el exalcalde Bonifacio De Santiago y la que fuera su segunda teniente de alcalde y concejal de Cultura y Personal, Isabel Grañeda; sobrina del condenado exregidor de Marbella Julián Muñoz.

Grañeda, que tomó declaración en la primera sesión del juicio, se ampara en que, al ser «favorables» los informes de los expertos al respecto, creyó que las actuaciones estaban «sujetas a Derecho» y que pensó que era «lo más beneficioso para el Ayuntamiento».

Como en el caso de sus homólogos imputados, se enfrenta a una pena de nueve años de inhabilitación por el presunto delito continuado de prevaricación administrativa.

Según el auto de la jueza Susana Polo, la acusación remite a la falta de cumplimiento durante años de la sentencia que los obligaba a rectificar la concesión de 120.000 metros cuadrados de suelo municipal a la RFEF, y que éstos «actuaron con desprecio a las decisiones llevadas a cabo por la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia, pasando por encima de la Ley, con la finalidad de seguir beneficiando a la RFEF».

Una «gran gestión»

La apreciación sobre el papel del Ayuntamiento de Las Rozas en la Ciudad del Fútbol es, sin embargo, antagónica en el caso de Ángel María Villar, presidente de la Real Federación Española de Fútbol. Villar define el trabajo consitorial como «una gran gestión», tanto en el regidor como en los concejales, a la par que destaca que De Santiago cumplió en todo momento con su obligación, ya que una vez conocida la resolución el Ayuntamiento inscribió los terrenos en el Registro de la Propiedad a su nombre, con la consiguiente pérdida de la titularidad de la RFEF.