El comercio cierra el puente con una subida del 20% en sus ventas

Confirmado: la confianza vuelve al comercio madrileño. Es lo que se ha visto, y notado, durante este último puente entre la Constitución —6 de diciembre— y, ayer, festividad de la Inmaculada Concepción. En la patronal del Comercio Especializado (Cofem), calculan que desde el viernes hasta el lunes, las ventas han aumentado una media de entre el 15 y el 20%.

Calles a rebosar, tiendas repletas de clientes; colas para comer, para hacerse con un cucurucho de castañas asadas, para comprar lotería... Así ha estado el centro y la «almendra» madrileña, un escenario que también han tenido otras zonas eminentemente comerciales como, por ejemplo, Goya, Fuencarral-Hortaleza, Argüelles, Castellana-Raimundo Fernández Villaverde, calle Bravo Murillo, y toda la «milla de oro».

Las previsiones se han cumplido y el tiempo –frío pero soleado–, ha acompañado tanto a los madrileños como a más de 700.000 turistas que han elegido la capital

para disfrutar de unas jornadas de ocio y compras.

Luis Pacheco, presidente de la Confederación de Comercio Especializado de Madrid (Cocem), aseguraba ayer a este periódico que, desde el viernes al lunes, las ventas han aumentado una media del 15%. «En sectores como el textil podrían haber rondado el 20% aunque en otros mucho más específicos, como el deporte, pueden haberse quedado en el 5%».

El «termómetro»

«Llevábamos –dice Pacheco–, cinco años en negativo, en números rojos... ¡Ya tocaba! A todos nos viene bien esbozar una sonrisa: al comerciante porque vende y al consumidor porque está deseando adquirir ese producto que necesita o ese regalo para los que quiere. El arranque de la campaña navideña ha sido muy positivo».

Los comerciantes se juegan mucho en este espacio festivo entre la Constitución y la Inmaculada Concepción. Es su «termómetro» particular. Casi nunca suele fallar. Supone el pistoletazo de salida de la campaña navideña, un periodo –el de Navidad y Reyes–, en el que se efectúan más del 40% de las ventas de todo el año.

A Pacheco, el comportamiento del comercio estos últimos cuatro días le hace tener buen pálpito. «Yo no lo llamo un puente. Es, más bien, un fin de semana largo. Y nos viene muy bien a todos. Los restauradores han servido muchas comidas, los hoteles están prácticamente al completo no sólo en el centro sino en zonas un poco más periféricas pero rodeadas también de comercio».

«Ya era hora de que todo esto ocurriera, El repunte del consumo nos beneficia a todos. Además, Madrid tiene otras muchas particularidades y atractivos. Por ejemplo, en materia museística y de ocio. La ciudad, entera, ya ha encendido sus luces navideñas y los adornos ya cuelgan por todos los rincones ... Se nota, por fin, una predisposición al consumo», añade el presidente de la citada patronal.

Los comerciantes, ayer mismo, tenían algo divididas sus opiniones. Algunos se mostraban satisfechos del arranque navideño. «Hemos hecho muchos números durante los últimos cinco años. Y muchos ajustes, tanto en los márgenes comerciales como en el capítulo de personal. El sacrificio, de todos, ha sido muy grande», explicaba un comerciante de la zona de Goya con la plaza de Colón.

A ese mismo «esfuerzo» se refiere Luis Pacheco, que huye del término «pequeño comercio». «Somos el gran comercio, el cercano, el tradicional y especializado. No es lo mismo el gran comercio que el comercio grande».

En Acotex, la patronal del sector textil, la percepción de los últimos cuatro días también es positiva. Su presidente, Borja Oria, asegura que, aunque las cifras no están cerradas todavía, «sí es cierto que ha habido mucho movimiento en las tiendas».

Con la paga extra

Oria afirma que «en 2014 vamos en positivo» pero tampoco se atreve a echar las campanas al vuelo. «Los últimos siete años han sido de duros ajustes en personal y precios. Ahora empezamos a recoger los frutos». Calcula, sin esas cifras cerradas del último fin de semana, que las ventas van hacia arriba, seguro, en un 5%.

Los consumidores se animan pero sus bolsillos, dicen, no están para muchos trotes. Manolo C. espera a la paga extra de Navidad. Ayer estuvo en Sol. «Hay barullo pero no tantas bolsas como me esperaba. A lo mejor todos venimos a mirar precios, a hacernos las cuentas ... Y picamos con algo».

Otro empresario lo tiene claro: «El gasto por turista baja. Lo que pasa es que vienen más. Es turismo de cantidad, no ya tanto de calidad».