Botella inyectará 87 millones más en la EMVS para evitar su cierre

El Ayuntamiento de Madrid deberá afrontar una inyección económica extra a su Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) de más de 85 millones de euros hasta 2018 si quiere evitar que caiga en «números rojos». El Plan de Viabilidad aprobado hace ahora año y medio se ha demostrado insuficiente, y es preciso reforzarlo para que la empresa no se hunda.

La Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local obliga a todas las sociedades públicas a corregir desequilibrios: no pueden tener pérdidas o tendrán que cerrar. Para mejorar la situación de la empresa, el Ayuntamiento tomó medidas, la primera de las cuales fue que la EMVS dejara de promover viviendas.

Además, puso en venta las promociones que tenía finalizadas y recibió ayuda de las arcas municipales para financiar las que le faltaban por terminar.

Pero la crisis se cebó en el mercado inmobiliario, y las previsiones de ventas –ingresos por 102 millones en 2013 inicialmente, que al final fueron menos de 19 millones– no se han cumplido, lo que ha puesto a la sociedad en una «situación de riesgo respecto de su Tesorería» que «si no se resuelve en el corto plazo, podría suponer la imposibilidad de hacer frente a sus compromisos de pago más inminentes», señalan sus responsables en su balance delPlan de Viabilidad.

Renuncias por la crisis

Lo primero que sugieren es un cambio de estrategia para el futuro:por un lado, el mercado demanda viviendas en alquiler, y no en venta:muchos adjudicatarios renuncian a los pisos por estar parados o por no contar con créditos. Esto va a llevar a la EMVS a pasar buena parte de su parque de pisos al alquiler.

La idea es que, a lo largo de los tres próximos años, de las 1.423 viviendas que hay en venta en la EMVS al menos 800 se destinen al alquiler. Esto que facilitará poner en el mercado estos activos, pero a la vez incrementa los gastos de gestión de los inmuebles, que se ven gravados por impuestos y generan costes de mantenimiento (más de un 52 por ciento de subida).

También se piensa ahorrar en el capítulo de personal: los contratos que se extinguen en los tres próximos años por jubilación o por llegar a su final darán lugar a una disminución de la plantilla del 12 por ciento, calculan. Y se recortará en días adicionales de vacaciones por años de servicio y días de libre disposición, y se suprimirán ayudas por matrimonio y natalidad. Así se piensa ahorrar 2,3 millones de euros hasta 2018.

Pero estos ahorros no son suficientes para compensar el desfase que los responsables de la empresa ya prevén que se producirá por la reducción de las ventas, el incremento de los gastos para mantener las viviendas en alquiler, y el aumento del endeudamiento. Ante lo delicado de la situación, proponen un incremento de las aportaciones que hace el Ayuntamiento a la empresa.

Traducido en cifras, esto supone que el Gobierno local deberá incrementar el dinero que hace llegar a la EMVS en unos 87 millones de euros. Concretamente, 18,8 millones de euros extra en 2015, 19,8 en 2016, 19,6 en 2017 y 9,6 en 2018, adicionales a los que ya se iban a abonar como subvención a la explotación en cada ejercicio. Y a esos hay que sumar la aportacion extraordinaria de 20 millones de euros que la empresa ha pedido en 2014.

Del Plan inicialmente trazado para el periodo 2013-2018, se han cumplido algunas premisas. Se han ahorrado 3,8 millones de euros de gastos de personal suspendiendo ayudas sociales o no sustituyendo a los empleados que se jubilan. También se ha ahorrado en otras partidas, como en mensajería, kilometraje, ferias, etc, otros 3 millones.