Los arenales de Samil se llenaban más que nunca en los primeros meses del verano
Los arenales de Samil se llenaban más que nunca en los primeros meses del verano - efe

El verano gallego de 2015 fue cálido y seco

Las altas temperaturas y las escasas precipitaciones de junio y julio son las principales culpables del resultado general

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Los meses de junio y julio elevaron la sensación climatológica media de la Comunidad durante el verano 2015. Según el Agencia Estatal de Meteorología, se trata de un verano extraordinariamente cálido y seco, con altas temperaturas y escasas precipitaciones. El mes de agosto se caracterizó por los grandes contrastes, que osciló entre el húmedo y muy húmedo en el oeste, y seco o moi seco en el este.

En junio, por tercer mes consecutivo, las anomalías de temperatura han resultado positivas en toda Galicia, con amplias zonas en medidas del mes superaron en más de 2º centígrados. Las máximas más elevadas se registraron en el día 29. En zonas de Orense y el sur de Lugo se superaron los 40 grados. En los que se refiere a los observatorios principales, con excepción de La Coruña, junio de 2015 se encuentran los tres o cuatro más cálidos de los últimos treinta años.

Junio resultó un mes seco, con zonas en las que las cantidades recogidas resultaron inferiores al 10 por ciento de los valores normales.

En cuento a las precipitaciones, se realizaron en forma de tormenta o chuvasco, de ahí que las cantidades más próximas a los valores normales se produjeran en Orense y Lugo que engloban las altura smás importantes. Se registraron trece días de tormenta, cifra elevada para un mes de junio en Galicia.

En julio continuó registrando meses cálidos y temperaturas medias que resultaron superiores a las normales en toda Galicia, con zonas del este en las que las anomalías superaron los 2º centígrados. Las precipitaciones registradas fueron en general inferioes a las medias, con zonas del interior donde no se alcanzó ni el 20 por ciento de estas.

En el mes de agosto, aunque la mejor parte de Galicia los valores de temperaturas medias resultaron normales para la época. Predominó de anomalías negativas, con zonas en el litoral occidental donde las medias resultaron inferiores en más de 1º centígrados los valores normales, hace que se ponga fin a una sucesión de catro meses cálidos en toda Galicia. Las máximas absolutas se aproximaron, aún que se llegaron a alacanzar, a 40º centígrados en el interior.

En lo que se refiere a las precipitaciones hay que destacar el contraste entre el tercio norte y mitad occidental, con áreas en las que las cantidades duplicaron ampliamente los valores medios, con puntos en los que no se llegó a alcanzar el 20 por ciento de los valores normales. Así por ejemplo, en el observatorio de Orense las cantidades acumuladas en el total del mes.

En el actual mes de septiembre, la primera quincena está siendo de frío general con temperaturas medias que resultan hasta un 1º centígrado a los valores normales. Durante los ocho primeros días del mes, las precipitaciones se redujeron las tormentas dispersas en el interior y lluvias de escasa importancia.

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