Rafael Louzán, expresidente de la Diputación de Pontevedra
Rafael Louzán, expresidente de la Diputación de Pontevedra - efe
«Operación patos»

El alcalde de Vigo y Louzán niegan haber recibido dádivas de la trama

Fuentes judiciales confirman que habrá más imputaciones que se irán conociendo a partir de la próxima semana

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Ni regalos ni dinero en efectivo. Tanto el alcalde de Vigo, Abel Caballero, como el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, negaron este jueves haber recibido dádivas por parte de la constructora Eiriña, en el epicentro de la «operación Patos», que desde 2014 investiga supuestas irregularidades en la adjudicación de contratos públicos y que suma hasta el momento cinco imputados. Entre ellos, Enrique Alonso Pais, responsable de la constructora Eiriña y Jaime A.V., director general; el gerente en Galicia de Cespa, Alfonso C.G, el técnico Juan Ramón A.G; y el exconcejal de Vías y Obras de Nigrán, José Álvarez Valverde (PP).

Será la próxima semana cuando el Juzgado de Instrucción número 7 de Vigo, encargado del caso, dé a conocer el resto de nombres implicados, y que afectarían a cargos públicos y funcionarios de tres provincias gallegas.

Recién levantado el sumario y a mes y medio de que comience el desfile de los imputados por el despacho de la juez en la calle Lalín, el contenido de los 13.500 folios de la causa comienza a desvelarse a cuentagotas.

Así, el informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía que reproducía ayer «Faro de Vigo» señala que Eiriña regaló relojes de alta gama al exconselleiro y exalcalde de Santiago, Agustín Hernández, al expresidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, y al alcalde de Vigo, Abel Caballero.

También figuran en la lista de supuestos agasajados la conselleira Ethel Vázquez, el exvicepresidente de la Diputación de Pontevedra, José Manuel Figueroa, la expresidenta del puerto Corina Porro, la exdelegada de la Xunta en Vigo Lucía Molares, y los concejales de Vigo David Regades, Ángel Rivas e Isaura Abelairas.

Los primeros en pronunciarse al respecto eran Louzán y Caballero, que coincidían en destacar su máximo respeto a la «labor judicial». El expresidente de la Diputación provincial aseguró tener la «conciencia muy tranquila» y al igual que el regidor vigués negó haber recibido ningún reloj de una de las empresas investigadas, extremo que hizo extensible a sus concejales.

Ninguno de ellos, y tampoco José Manuel Figueroa, según defendieron ayer, participaron de las supuestas reuniones en las que se pudo tratar algún concurso público, menos a los «amañados» a los que apunta la UDEF. El exvicepresidente de la institución pontevedresa no ocultó su sorpresa por el contenido desvelado de las diligencias judiciales, si bien matizó que «lo serio y lo riguroso» es tener conocimiento del «conjunto del sumario» para a partir de ahí «hacer un pronunciamiento oficial».

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