La «especial configuración urbana» de Villanueva del Conde hace que la Junta lo reconozca Conjunto Histórico

La Ley de Patrimonio Cultural de la Junta de Castilla y León dispone que tendrá la consideración de Conjunto Histórico «la agrupación de bienes inmuebles que forman una unidad de asentamiento, continua o dispersa, condicionada por una estructura física representativa de la evolución de una comunidad humana, por ser testimonio de su cultura o constituya un valor de uso y disfrute para la colectividad, aunque individualmente no tengan una especial relevancia. Asimismo, es Conjunto Histórico cualquier núcleo individualizado de inmuebles comprendidos en una unidad superior de población que reúna esas mismas características y pueda ser claramente delimitado».

De este modo, el Gobierno autonómico acaba de otorgar ese reconocimiento a la localidad salmantina de Villanueva del Conde, cuyo elemento «más destacado y diferenciador es su estructura urbana», según se recoge en la resolución de 26 de enero de 2015 de la Dirección General de Patrimonio Cultural por la que se incoa expediente para la mencionada declaración.

«Se trata de una estructura atípica, configurada como un recinto amurallado perfectamente cerrado, formado por las propias edificaciones que se iban construyendo a lo largo de la horquilla que hacían los caminos que llevaban a Miranda del Castañar», añade la disposición.

Situada al suroeste de la provincia, este municipio, de unos 200 habitantes y a unos 80 kilómetros de distancia de Salamanca capital, ha sido, en palabras de su alcalde Javier García Hidalgo, «el gran desconocido» y de este modo asegura que su pueblo «tiene el traje, pero que le faltaba el evento», en alusión a la reciente declaración que eleva a quince el número de municipios y espacios que ya son Conjunto Histórico en la provincia salmantina, algunos desde hace 75 años como es el caso de La Alberca, pero «vamos a ver si acortamos los plazos» sostiene el regidor.

De «espaldarazo y de apoyo muy importante» para el municipio y para la comarca, considera García Hidalgo el reconocimiento como Conjunto Histórico y se muestra confiado en que el pueblo, a cuyos vecinos y asociaciones agradece el trabajo que realizan y la colaboración que prestan, «pueda tener un desarrollo económico» a partir, sobre todo la hostelería y de la restauración.

«Villanueva del Conde –recalca el alcalde- fue pionero hace ya tres décadas en el sector del turismo de interior de Castilla y León y actualmente cuenta con 27 alojamientos rurales y un hotel», lo cual hace que los fines de semana entre noviembre y marzo haya en la localidad «más visitantes que vecinos».

Con la mente puesta en ese futuro prometedor que ha de llegar, García Hidalgo sostiene que entre «el 80 y el 90 por ciento de los pueblos que obtienen una catalogación a la vuelta de diez o quince años se han desarrollado» sobre todo desde el punto de vista turístico.

Así, pues, anima a los viajeros a que «vengan a conocer nuestro municipio, nuestra hostelería, nuestra cultura y tradiciones, y nuestras piscinas naturales únicas en la provincia, además de unas plazas muy amplias, unos espacios muy abiertos. Es un pueblo muy cómodo y tranquilo» y alienta a «apostar desde el punto de vista empresarial».

Confiesa que la catalogación, de la que dice que es el «kilómetro cero de lo que Villanueva del Conde puede llegar a ser» le ha «colmado como alcalde» después de ocho años al frente del Consistorio y otras dos legislaturas como concejal, a la vez que considera que «no hay nada como ser alcalde de tu pueblo», responsabilidad para la que volverá a concurrir en los comicios del próximo mes de mayo.

La Alberca, Mogarraz, Sequeros, Miranda del Castañar, San Martín del Castañar, Béjar, Candelario, Ciudad Rodrigo, Ledesma, Peñaranda de Bracamonte, Salamanca, Montemayor del Río, San Felices de los Gallegos y la Calzada de la Plata son los otros catorce Conjuntos Históricos con los que cuenta la provincia salmantina.