A malos tiempos, mejores empresas

Aunque se hable mucho de turismo y todo el mundo haya viajado y sea capaz de analizar cuál es un buen destino y cuál no, ha tenido que venir una fuerte crisis económica, que ha afectado directamente a la demanda, para que en el II Plan de Calidad de Andalucía se plantee por primera vez en España un análisis concienzudo sobre el nivel de satisfacción del cliente. Será el Índice de Satisfacción Turística y permitirá conocer la opinión del viajero respecto al destino y medir la diferencia existente entre la calidad recibida y la esperada. Entre las acciones contempladas en el plan que presentó la Consejería de Turismo el viernes pasado se encuentran estudios acerca del comportamiento y las motivaciones del visitante y el análisis de la información sobre quejas y reclamaciones.

Otro aspecto que ha sido muy discutido en Cádiz con la llegada de los cruceristas hace referencia a la coordinación entre comercios, empresas turísticas, barcos y touroperadores, en el sentido de que han de ir todos a una para mejorar la oferta de la ciudad o la tan nombrada oferta conjunta de la Bahía de Cádiz. También se barajan estas opciones en el II Plan de Calidad andaluz, por primera vez.

En esta ocasión se plantea la concentración de destinos, a través de un nuevo modelo de gestión que busque la complicidad en la gestión de todos los agentes y que también articule las medidas que ya se realizan sobre el territorio con mejoras en el itinerario de consumo del turista.

Esta programación también incluye el desarrollo de un programa de eficiencia de negocios dirigido a la mejora de los márgenes empresariales, la identificación de un catálogo de buenas prácticas y la apuesta por las marcas de calidad y certificaciones.

Ahora solamente falta saber cómo se incentivará desde la administración pública a las empresas para que todas estas actuaciones se hagan realidad.