El conservador alemán Laschet presenta un equipo innovador pero sin rodaje de gobierno

Las encuestas castigan duramente a la CDU/CSU y los conservadores alemanes tratan de dar un giro a su campaña electoral con la presentación del equipo de su candidato, Armin Laschet , que hasta ahora hacía campaña prácticamente en solitario y no designaba ministros en la sombra por respeto a sus compañeros de partido todavía al mando de las carteras. Pero una vez identificada esta soledad como una de las principales causas del desastre demoscópico, Laschet acaba de nominar a ocho personas que propone para su gobierno, incluyendo a cuatro mujeres y cuatro hombres, un equipo con representación de los Länder y la política local, su cuota racial y que reúne a jóvenes dinámicos e innovadores con la vieja CDU, representada fundamentalmente por la presencia de Friedrich Merz. Exlíder del grupo parlamentario y sinónimo de DAX 30, su presencia garantiza rebajas fiscales y presupuesto equilibrado, además de cerrar heridas en el interior del partido. Merz ha prometido un «euro estable» y «utilizar todo el potencial de crecimiento de nuestra economía».

En la foto de grupo falta un ministro de Exteriores, hueco que Laschet deja para el partido con el que haya de formar coalición , pero sí cuenta con una presencia que llega a renovar la relación entre la política de Interior y Exteriores, Peter Neumann. Experto en terrorismo, fundador del Centro Internacional para el Estudio de la Radicalización en el King's College de Londres, tiene excelentes contactos internacionales y «conoce bien las amenazas», ha dicho Laschet, señalando como objetivos el terrorismo internacional y los radicalismos, tanto de derecha como de izquierda. «Nuestros mayores retos, como la pandemia, el clima, las guerras híbridas o la seguridad nacional, se juegan en una línea continua que una Interior y Exteriores», ha expresado su ambivalencia la figura más innovadora del equipo.

Andreas Jung aparece como responsable del área de clima y energía. «Necesitamos más velocidad en la protección del clima », ha dicho, y ha prometido basar el cambio en la innovación y la tecnología, muy especialmente en el hidrógeno, y «manteniendo los puestos de trabajo». Dorothee Bär, al frente de Estado Digital, ha expuesto que «tenemos que acelerar la administración», encender el «turbo digital» para facilitar la vida de las personas y las familias. Doro Bär, como la llaman en el partido, se ha mostrado muy satisfecha de pertenecer a un equipo que «juntos sumamos por ahora 19 hijos y 2 nietos, lo que demuestra que trabajamos para el futuro».

Laschet quiere que Alemania se convierta en una «república en ascenso» y por ello quiere al frente de Educación a Karin Prien, que cree que «nos encontramos a las puertas de una revolución educativa a la que hay que responder no solo con tecnología, sino con pedagogía», y que considera que «crear igualdad educativa es un megatema de nuestro tiempo». Quiere asegurase de que todos los niños hablen alemán cuando lleguen a la escuela. Silvia Breher llega con nuevas ayudas a las familias bajo el brazo; Barbara Klepsch se propone ampliar la cuota de médicos rurales y construir millón y medio de viviendas urbanas hasta 2025; y Joe Chialo, al frente del departamento de Economía Creativa, llega para asistir a los intelectuales y artistas. Chialo nació en Bonn de padres tanzanos que trabajaban en el servicio diplomático. Después de estudiar Historia, Política y Economía en Erlangen, comenzó en 1997 una carrera como gerente musical y productor televisivo. Laschet confía en que ayude a incentivar «nuevos modelos de negocio».

«Ahora quedamos a la espera de ver qué equipo presenta la nueva coalición de izquierdas», ha retado Laschet en su despedida a su contrincante, Olaf Scholz , subrayando así que el socialdemócrata necesitará para gobernar a partidos que pondrán fin a su aparente moderación y declarado centrismo . Pero por más que se esfuerce en ofrecerse como alternativa a un gobierno de izquierda más o menos radical, Laschet está dejando atrás una era en la CDU y es evidente que presenta un equipo al que le falta rodaje de gobierno.