Gabriela Michetti: «No concibo la política ligada a la corrupción en Argentina»

Gabriela Michetti recibe en la cocina de su casa. Se mueve con naturalidad, prepara un té y mientras lo hace, habla de todo. Del estrés de la campaña, del Gobierno, de la medicación que tiene que tomar y de la rehabilitación que necesita para reducir los dolores del accidente que la dejó en silla de ruedas hace veintiún años. La senadora, ex vice jefa de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires y actual candidata a la vicepresidencia del Gobierno con Mauricio Macri, va segunda en las encuestas con Cambiemos, una coalición mixta donde conviven socialdemócratas, liberales y conservadores.

«Los dolores son crónicos. Hay personas que no pueden trabajar, y piden certificado de minusvalía. Yo, que soy pura voluntad, sigo para delante», comenta antes de responder sin rodeos.

-¿Que hubiera hecho en el caso de ser vicepresidenta, como Amado Boudou, y tener tres procesamiento por corrupción?

-Es imposible que a mí me hubiera pasado. No concibo la política ligada a la corrupción. Para mí es servicio público. Debemos tener una conducta ejemplar y más en Argentina donde hay desconfianza en los políticos y en las instituciones.

-La Justicia que va a heredar el próximo gobierno está bajo sospecha. ¿Considera que necesita un proceso de mani pulite, limpieza?

-Hay que desarrollar una política de Estado que nos permita, en determinado tiempo, tener una Justicia que nos genere confianza. La Justicia que hoy tenemos no nos genera confianza a los argentinos.

-Casi todos los presidentes de la democracia colocaron en cargos públicos a hermanos o familiares. ¿Harían ustedes lo mismo?

-Uno de nuestros compromisos es no tener parientes directos en puestos de libre designación. Lo mínimo es evitar el nepotismo, es algo básico.

-¿Cómo desterrar, en términos absolutos, en Argentina la idea de fraude en las elecciones?

-Lo más importante es cambiar la ley electoral. Nosotros no pudimos porque el kirchnerismo nunca quiso, impuso su mayoría automática para poder hacer trampas y quedarse con los gobiernos provinciales y municipales mediante el fraude de dos ó tres puntitos.

-Uno de los grandes desafíos para el próximo gobierno es recuperar la economía ¿Cómo lo harían?

-La palabra clave es confianza. Nadie te presta a menos del 9 por ciento, tenemos el doble de tasa que los países latinoamericanos, el único que genera empleo es el Estado con subsidios, no hay inversiones y 250.000 millones de dólares, de los argentinos, están fuera del circuito financiero. Esta cifra equivale a la deuda argentina.

-¿Cómo se explica que el favorito sea el candidato oficialista Daniel Scioli y esté a un paso de ganar en primera vuelta?

-El 60 por ciento de los argentinos quiere un cambio y el 40 continuidad. Eso son las PASO (Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias). Lo que tenemos que lograr es que la gente vea que Cambiemos, que somos los que más votos logramos en las PASO, tenemos la posibilidad de disputarle el gobierno a Scioli y no otros grupos.

-¿Qué cuota de responsabilidad tienen ustedes, como oposición, de encontrarse en esa situación?

-Hemos hecho denuncias, proyectos… ¡Lo que se te ocurra! Pero cuando no tienes la herramienta real de poder que es el voto en la Cámara no tienes manera de intervenir frente a un Gobierno que impone su mayoría absoluta.

-¿Su problema es no haber sabido conquistar esa herramienta del voto?

-También hay que decir que existe una responsabilidad ciudadana. En 2011 el 54 por ciento votó la reelección de Cristina Fernández de Kirchner. Ese gobierno había hecho barbaridades con el campo y en otros sectores pero la votaron. Es la gente con su voto la que tiene que cambiar las cosas.

-El fiscal Alberto Nisman murió el 28 de enero y aún no se sabe cómo fue …

-Es uno de los casos más dramáticos. Si somos gobierno propondremos fórmulas que ayuden a esclarecer el caso. Quizás, una comisión modelo Conadep ( Comisión Nacional de Desaparición de Personas postdictadura) para ayudar a la investigación.

-¿Qué imagen cree que hay de Argentina en el mundo?

-La imagen de Argentina debe ser la de un país que apuesta por la institucionalidad, la transparencia y la confianza. Por desgracia, no es la que tenemos ahora.

-¿Mauricio Macri tiene las condiciones y podría gobernar los cuatro años que quedan con el peronismo/Kirchnerismo en contra?

-Lo mismo decían cuando llegamos al gobierno de la ciudad de Buenos Aires. Si con todo en contra, durante ocho años, pudimos hacer lo que hicimos en la ciudad - sin tener mayoría en la Legislatura- y aprobar dos mil y pico leyes, cómo no vamos a poder gobernar. Mauricio sabe gestionar y buscar consensos. Con el desastre que hay ahora es la persona más idónea para sacar adelante Argentina.

-¿Se ha usado políticamente la figura del Papa?

-Todos los políticos han abusado de la figura del Papa pero la peor, de lejos, ha sido la presidenta. Prácticamente, le invadió el Vaticano con La Cámpora (organización kirchnerista). Fue muy abusivo, espantoso.