Soplan aires nuevos en Inesperado, en la playa de La Calzada de Sanlúcar

En junio de 2001 comenzó el camino de Inesperado, un chiringuito en el paseo marítimo de la playa de La Calzada de Sanlúcar, a poca distancia del popular y concurrido Bajo de Guía. José Manuel Parejo, ahora como encargado, había nacido un mes antes. Su padre, del mismo nombre pero conocido por todos como Pigüi, se hizo cargo de este negocio, que llevaba un tiempo en desuso. Luego vendría El Mirador de Doñana, pero esa es otra historia.

José Manuel, hijo, recuerda ahora que «entonces era un chiringuito que se desmontaba en septiembre, el típico de playa, con familias durante el día y fiestas por la noche. Pero luego se centró más en el almuerzo».

Tras estudiar Dirección de Hostelería, su padre decidió que era el momento de desmarcarse de lo tradicional y hacer algo distinto a lo que se estila en esa zona.

En El Mirador, ya tienen al cliente que va buscando Bajo de Guía, así que Inesperado tuvo una amplia reforma que lo cambió por completo para dejar atrás el pasado.

Inesperado Restaurante Al Mar, que así se denomina ahora, tiene un interior amplio, con una zona central de restaurante y un lateral en el que se ofrece tapeo. «Ahí tenemos las cosas más típicas de tapeo sanluqueño, con papitas aliñás, tortillas de ortiguillas, pescado frito y ese tipo de cosas. Después queremos potenciar la zona de chill out, para copas y el tardeo, que la gente no tenga que ir a otra zona para disfrutar con ese estilo».

En el restaurante, con un aforo de entre 65 y 75 comensales, ofrecen desayunos continentales, tipo brunch, con zumos, boles de yogur, frutas o cereales y tostadas. En el almuerzo y cena, José Manuel dice que «llevábamos 20 años siendo un chiringuito de familia, con guisos y platos del día, combinados, espetos… Eso ya quedó atrás y tenemos una carta más moderna, cercana a lo que puede conocerse como gastro bar. No fue fácil al principio, porque había clientes que venían y al ver la carta, decidían irse».

Y es que han dejado de ser tradicionales, tanto, que «ni tan siquiera solemos tener marisco. Cuando entra algo con buena relación de calidad y precio, sí que lo incluimos fuera de carta, pero no nos sentimos obligados a tener el pescado frito de los bares del centro de Sanlúcar, ni los mariscos que tienen en Bajo de Guía».

En su carta, como entrantes fríos, hay platos como la ensaladilla de gamba al ajillo con carpaccio de gamba, cogollitos de pescado de roca con tártara cítrica, carpaccio de presa ibérica al humo, parmesano y brotes, picadillo de atún rojo, guacamole, pico de gallo y mayonesa de guindilla, servido con nachos y salsa de yogur, o atún rojo en tartar.

En los calientes están algunos de esos platos más de gastro bar, como anunciaba José Manuel. Por ejemplo, los baos, bien de cangrejo chiguato con salsa chili crab y verduritas frescas, bien de carrillera ibérica con salsa pekín y verduritas frescas. También el taco de puntillitas fritas, guacamole, pico de gallo y alioli de tinta de calamar. Croquetas, de langostino de Sanlúcar a la brasa o de jamón y panceta ibérica; picaña de vaca a la llama rellena de boletus y quesos de la Sierra, o alcachofas a la brasa con lascas de papada ibérica y huevo poché, otras de las opciones, con almejas a la marinera o coquinas para concluir.

En Inesperado hay igualmente fritos clásicos como el choco o el cazón en adobo, y arroces y fideuás, de estos últimos con calamares, puntillitas fritas y huevo poché, y de langostinos de Sanlúcar a la brasa. En cuanto a los arroces, de rape, almeja y langostinos, negro de calamares y alioli, de carabineros e ibérico.

La vitrina de pescado marca cada día de este producto, que se puede preparar a la sal, a la espalda, plancho o al horno. Y para los amantes de la carne, tartar de vaca madurada y ahumada, pollo picantón a la brasa, hamburguesas, de vaca o de buey, y presa ibérica de bellota, lomo de vaca premium madurada 45 días y chuletón de vaca premium nacional. Los postres, de chocolate, limón, queso y manzana.

Además, están recuperando el sushi, producto que elaboraron hasta navidades y que tuvo un pequeño parón. Carlos, actual jefe de cocina, está preparando una carta muy curiosa, en palabras de José Manuel.

El restaurante Inesperado está en la calle Director Julián Cerdán, 24, de Sanlúcar de Barrameda, y su teléfono para reservas es el 956 41 50 33.