Las brasas de El Huaso encendieron en el alma de las bodegas Tío Pepe una velada única. Veranea en la Bodega 2025 volvió a vibrar con el inconfundible sello gastronómico de Carlos Martel, el jerezano que ha sabido convertir su personal proyecto El Huaso en un referente de la cocina a la brasa. El espectacular jardín botánico de Villa Victorina se llenó de aromas ahumados, luces cálidas y un ambiente que combinó tradición, creatividad y hospitalidad. Los comensales se sumergieron en un recorrido culinario inspirado en las técnicas de asado del Cono Sur. Cortes de carne seleccionados con mimo, fuego controlado con precisión, maridajes pensados para resaltar cada matiz gracias a los vinos de González Byass y una puesta en escena diseñada al milímetro convirtieron la noche en una experiencia esculpida para despertar todos los sentidos.
La velada fue un ritual compartido en el que las brasas y la calidez del entorno -abrigado por árboles y plantas de más de 40 especies- se tornaron en protagonistas. La segunda cita con esta oda al asado, que ha conquistado a comensales de España, Francia y Marruecos- será el próximo jueves 14 de agosto.
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