Los mejores sitios de ostras en Cádiz: bares y restaurantes con ostras y ostiones típicos

Mercedes Ordóñez

Cádiz

21/07/2025
Actualizado a las 13:48h.

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Pocas ciudades pueden presumir de tener el mar tan presente en su día a día como Cádiz. Aquí, donde las calles huelen a salitre y el viento de Levante te pone a prueba, la cocina no se entiende sin los manjares que ofrece la bahía. Y entre ellos, pocos hay tan singulares como la ostra y el ostión, que en las barras gaditanas se sirven fríos y conservando el sabor intacto de la marea.

A diferencia de la ostra francesa, de textura más fina y sabor delicado, el ostión, como se le conoce en Cádiz, es más carnoso y salino, con un sabor que no deja indiferente a nadie.

La ostra suele disfrutarse con un toque de limón o una chalota en vinagre suave; el ostión, sin embargo, va directo, como todo en Cádiz: con carácter, sin adornos, con un retrogusto que recuerda que el océano Atlántico está en cada bocado.

En esta guía, el crítico gastronómico Enrique Pérez Martínez nos propone un recorrido por seis bares y restaurantes donde se honra este manjar marino con mimo y autenticidad.

En pleno barrio de La Viña, El Faro es mucho más que un restaurante: es una institución de la gastronomía gaditana. En su elegante barra, las ostras y ostiones comparten protagonismo con tortillitas de camarones y cañaíllas, pero brillan por sí solos en su versión más pura: al natural, sobre hielo picado, recién abiertas y servidas con una copa de manzanilla bien fría. Las ostras XXL son ya un clásico que resume el espíritu del lugar: excelencia sin perder el acento andaluz.

Este nuevo y acogedor establecimiento con un aire de bistró marinero, es uno de esos bares donde el producto habla por sí solo. Las ostras llegan frescas, servidas con sencillez y permiten saborear esa textura mantecosa y yodada que atrapa desde el primer bocado. Acompañarlas con una copa de vino blanco o una cerveza eleva la experiencia en este entorno íntimo y sin artificios situado en la céntrica Plaza de la Candelaria.

 

Ubicada frente al Atlántico, en el Paseo Marítimo, La Marea es un restaurante especializado en mariscos y frituras que también rinde homenaje a las ostras naturales, servidas sin trampa ni cartón, como entrada a un festín costero. El ambiente relajado, las vistas al mar y el desfile de productos frescos convierten cada visita en una degustación del litoral gaditano.

Con siglos de historia y vistas al Parque Natural de la Bahía, El Ventorrillo El Chato representa la versión más señorial de la cocina de mar. En su carta, las ostras ocupan un lugar especial, servidas como entrante, apostando siempre por la calidad. Aquí, el producto se trata con el respeto que merece, y el comensal se sienta a la mesa sabiendo que va a vivir un viaje entre dunas, salinas y espuma.

Moderno, creativo y con espíritu cosmopolita, Beduino ha sabido reinterpretar el recetario gaditano sin renunciar a sus raíces. En su propuesta, las ostras se sirven tanto al natural o preparadas con ponzu o granizado de manzana verde que no enmascaran, sino que realzan el sabor original.

Es el lugar ideal para quien quiere descubrir la ostra en un contexto contemporáneo, sin perder el vínculo y el sabor del mar.

El restaurante Salicornia, dirigido por el chef Juan Höhr, es una oda al mar gaditano. Su carta incluye ostras Gillardeau nº2, posiblemente las más apreciadas por su equilibrio entre textura y sabor, y se ofrecen tanto al natural como en tempura, una combinación que sorprende por su delicadeza. En un local de estética cuidada, esta experiencia marina se acompaña de vinos escogidos con precisión y platos que celebran el entorno de la bahía.

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