CÁDIZ Y SUS BARES
Descubre el postre estrella del Faro de Cádiz
El broche final perfecto de una comida en este clásico gaditano que no te puedes perder si eres un amante de los dulces
Bizcocho de chocolate del restaurante El Faro de Cádiz
En pleno barrio de La Viña, muy cerca de la playa de La Caleta, el Restaurante El Faro de Cádiz mantiene su esencia marinera desde hace más de medio siglo. Famoso por su cocina tradicional gaditana y por la maestría con la que trata el producto del mar, también guarda tesoros en su apartado más dulce. Uno de ellos es su bizcocho templado de chocolate relleno de helado de vainilla y una salsa de caramelo, un postre que muchos clientes califican como «el final perfecto» de una comida en El Faro.
Un clásico que conquista en Cádiz
Este postre es, en sí mismo, una experiencia sensorial. Se presenta como un pequeño bizcocho de chocolate, horneado al momento para conservar su textura esponjosa y el corazón tierno y fundente del interior.
Al abrirlo con la cuchara, el contraste de temperaturas se revela: el calor del bizcocho se mezcla con el frío del helado de vainilla que esconde en su interior, creando una fusión irresistible que se realza con una salsa de caramelo elaborada artesanalmente. La combinación de estos tres elementos convierte cada bocado en un equilibrio perfecto entre dulzura y sutileza.
El secreto del éxito de este postre radica, como todo en El Faro, en el respeto por la materia prima y en la técnica precisa. No es un simple bizcocho con helado, sino una creación pensada para cerrar la comida con elegancia, con la misma dedicación con la que se prepara una lubina de estero o una cazuela de rape al ajillo. En palabras del equipo de cocina, «un buen menú no termina hasta que el postre deja el sabor final que el cliente recordará al salir».
Su precio, 7,70 euros, aparece reflejado en la carta oficial del restaurante, donde comparte protagonismo con otras propuestas emblemáticas como el arroz con ortiguillas o los langostinos de Sanlúcar.
Disfrutarlo en una de las salas de El Faro, rodeado del ambiente acogedor del barrio de La Viña, es una experiencia tan gaditana como sus famosas tortillitas de camarones.
El Faro de Cádiz: un clásico de La Viña
El Faro de Cádiz ha hecho de la continuidad su sello. Desde su apertura en la década de los sesenta por Gonzalo Córdoba, ha sido testigo de la evolución gastronómica de la ciudad y de la provincia.
En sus salones y en su barra han coincidido generaciones de gaditanos, viajeros, artistas, escritores y amantes del buen comer. Hoy, con Fernando Córdoba al frente, la casa sigue manteniendo esa mezcla de elegancia y autenticidad que la caracteriza.
La repostería, tradicionalmente el rincón más discreto de los restaurantes de cocina andaluza, ha ganado protagonismo en los últimos años, y el bizcocho templado de chocolate se ha convertido en un clásico moderno que ya forma parte del imaginario dulce de Cádiz.
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