Woolston pasó esta semana por Madrid para presentar el nuevo perfume masculino de YSL.
Woolston pasó esta semana por Madrid para presentar el nuevo perfume masculino de YSL. - Maya Balanya

Winnie Woolston: «Ser modelo es un trabajo muy serio»

El neozelandés, imagen de Yves Saint Laurent, es el nuevo chico malo de la moda masculina

Madrid Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Dicen de él que es una mezcla de Alain Delon y James Dean, aunque al neozelandés Vinnie Woolston no le gustan esas comparaciones. «Preferiría que no me vieran como el chico que se parece a alguien, sino como yo mismo, con mi sello». El nuevo rostro del perfume «L’Homme de Yves Saint Laurent» rompe las normas estéticas llevando todo el cuerpo dibujado. «He perdido la cuenta de cuántos tatuajes tengo -asegura-, ya casi me he convertido en un cuadro». Aunque la mayoría son puramente estéticos, lleva algunos símbolos maoríes «de nuestro clan, de mi tierra, que son muy especiales para mí», señala.

Le sorprende el interés que despiertan sus tatuajes en España, pues para él resultan de lo más normal.

«En Nueva Zelanda todo el mundo está tatuado, es parte de nuestra tradición». Reconoce que ese ha sido el secreto de muchos éxitos, pero también el de algún rechazo: «Para ciertos trabajos me han contratado por llevarlos, pero en otros me han rehusado por la misma razón». No descarta seguir grabándose las manos, el cuello e incluso el rostro, «aunque para eso tendré que retirarme de este mundo».

Sus dedos están decorados con anillos, sus orejas perforadas por unos aros e incluso tuvo un piercing en la ceja, que se tuvo que quitar por motivos de trabajo. ¿ Es usted un rebelde o sólo lo parece? «Mis padres me enseñaron a no conformarme, me educaron de una forma muy liberal, y me han dejado ser y hacer lo que me parece. Si eso es ser rebelde, lo soy».

Este modelo neozelandés de 30 años, empezó su carrera a los 17 por pura diversión: «Estaba trabajando en una tienda de skate y me pidieron posar para unas fotos. Me lo tomé como un divertimento durante una temporada». Ahora está feliz en este mundo, aunque le molesta que muchos esperen que sea el esterotipo de Ben Stiller en «Zoolander», «porque mi trabajo es muy serio».

Lejos de casa

Lo único que no le gusta de su profesión es que le mantiene alejado de su familia. Vinnie vive con su mujer y tres niñas pequeñas -«una de ellas es solo de mi pareja», explica-, y no descarta lanzarse a por el niño, «aunque mi mujer me ha pedido un descanso», dice entre risas. Fuera de la pasarela y los estudios fotográficos dedica su tiempo a dibujar y practicar todos los deportes que puede: skate, surf, rugby… «Soy muy físico y me gusta mucho el reto», declara. No es presumido, asegura que no hace dieta, porque ese cuerpo se lo ha regalado la genética, y tampoco se aplica cremas. «Pero me encantan los perfumes», dice.

¿A qué huele Winnie Woolston? La respuesta es obvia: «A “L’Homme de YSL” por el día y “Nuit de L’Homme” por la noche», contesta. ¿Y a que le gusta que huela una mujer? «A notas frescas, no demasiado frutales, ligeras…». ¿Qué opina de las mujeres españolas? «Son guapísimas», contesta azorado. Y es que, a pesar de su imagen de malote, se define como un hombre tímido: «No me gusta exponerme fuera de mi trabajo», declara. De hecho, su cuenta de instagram es privada y sólo tiene 12 publicaciones y 238 seguidores. «Utilizo las redes sociales simplemente para estar en contacto con mis amigos, y no acepto a desconocidos». Cuando le preguntamos cuál es su mejor arma de seducción, se sonroja: « Creo que gusto por ser yo mismo, por no pretender ser lo que no soy».

Ver los comentarios