Un quinto marido para Pamela Anderson: se casa con su guardaespaldas

Pocas cosas sorprenden ya de Pamela Anderson a estas alturas de partido. A sus 53 años, es una de las actrices que más titulares ha copado por sus aventuras dentro y fuera de la gran pantalla. Comenzaba 2020 casándose con el productor de cine Jon Peters , del que se separaba a los 12 días por manipulador, y terminó el año volviendo a pasar por el altar, según ha podido conocer Page Six este jueves a través de la propia protagonista.

Se trata de su guardaespaldas Dan Hayhurst , del que se enamoró durante la época de confinamiento. «Este año juntos ha contado como siete, como los años en la vida de los perros», ha bromeado Pamela Anderson sobre la breve relación que han mantenido antes de formalizar.

Con esta boda parece que la actriz ha «cerrado el círculo» -como ella cree- al haberse celebrado en Nochebuena en el jardín trasero de la casa de Vancouver, Canadá, que la actriz le regaló a sus abuelos hace 25 años y en la que sus propios padres, Carol y Barry Anderson , se casaron. Y aún siguen estando felizmente unidos. De ahí la importancia para ella del lugar escogido y lo que simboliza.

Dan Hayhurst se une a la larga colección de maridos de Anderson. Con Peters no está claro que se llegase a formalizar: «Agradeceríamos mucho vuestro apoyo ahora que nos vamos a tomar un tiempo para reconsiderar lo que queremos de la vida y el uno del otro. La vida es un viaje y el amor es un proceso. Con esa verdad universal en mente, hemos decidido de mutuo acuerdo posponer la formalización de nuestro certificado de matrimonio y poner nuestra fe en este proceso», explicaban ambos el pasado año.

Peters es el cuarto marido fallido de la actriz después de Tommy Lee , Kid Rock y Rick Salomon (con él que se casó hasta en dos ocasiones). Con quien no llegó a casarse y parecía que la cosa era inminente antes de descubrir que llevaba una doble vida fue con el futbolista Adil Rami , al igual que con el modelo Marcus Schenkenberg, con quien llegó a comprometerse pero nunca a casarse. Una lista a la que ahora se suma su guardaespaldas.

Poco antes de dar a conocer su boda, Anderson anunció que se desvinculaba de las redes sociales . «Este será mi último post en Instagram, Twitter y Facebook», escribió junto a una última publicación. ¿La razón? Cree que son una forma de control mental . Así tendrá más tiempo para estar con su nuevo marido y las cosas de las que disfruta: «Ahora que me he asentado en la vida estoy realmente inspirada por leer y estar en la naturaleza. Soy libre».